Los bebés que toman pescado pronto evitan sibilancias

Según un reciente estudio realizado en Suecia, los bebés que han empezado a consumir pescado antes de los nueve meses de vida, presentan una mayor resistencia a padecer sibilancias en la etapa preescolar que los que empezaron a consumirlo a edad más tardía.

Este trabajo científico, que será publicado durante este mes en la revista «Acta Pediátrica», ha sido realizado por el Hospital Infantil Reina Silvia, de Gottemburgo, tras estudiar a 4.171 familias escogidas al azar y cuyos niños se encontraban en distintas edades: 6 meses, 12 meses y 4 años y medio.

Con este trabajo, el equipo médico pretendía distinguir y comprobar las causas de esta afección respiratoria para conocer sus orígenes, así los motivos por los que se producía. De igual modo comprobar las diferencias entre aquellas que se producían por factores varios o la sibilancia vírica transitoria.

Puesto que se trata de una afección muy común en bebés, los investigadores han querido recabar el mayor número de información para intentar evitarla. Es así como se ha llegado a la conclusión de que comer pescado antes de los nueve meses reduce, casi a la mitad, la probabilidad de padecer sibilancia crónica al cumplir los cuatro años. El pescado más consumido en aquellos niños estudiados han sido el pescado blanco, el salmón y el lenguado.

Sin embargo, el estudio también ha demostrado que aquellos niños que fueron tratados con antibióticos durante la primera semana de vida o las madres gestantes que tomaron paracetamol durante el embarazo, también están expuestos, en un grado muy alto, de padecer sibilancia crónica.

Vía | Cordis. Comisión Europea
Foto | Crece Bebé

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