Lectura recomendada de la semana: ¡Mucho ojo con los piojos!
A lo largo de la infancia ocurren hechos memorables, maravillosos y, también, de lo más trágicos. Es así como nos encontramos con algunos inconvenientes que suelen ir asociados al crecimiento, y el descubrimiento del mundo más allá de los brazos de mamá. Generalmente, cuando nuestro niño empieza a ir a la escuela es cuando empieza a volverse más independiente y ya le van ocurriendo cosas que, a menudo, no sabe bien como solucionar. Es ahí cuando nos daremos cuenta que va madurando y tomando decisiones por sí mismo.
Su círculo social se amplía, empieza a acumular sabiduría, a través de las letras, los números, los colores…, y también se amplía su creatividad. Pero en el cole también podemos encontrar algunas pequeñas sorpresas que no son del todo agradables. Es el caso de los piojos que, de forma invariable y puntuales a su cita, llegan a las cabezas de nuestros niños, siempre sin importar ni valorar nuestros cuidados. Algunos niños no lo llevan muy bien, por eso es importante que se lo sepamos explicar. Pero ¿cómo hacerlo? Un divertido cuento nos puede ayudar.
«¡Mucho ojo con los piojos!» es un divertidísimo cuento en el que se plantea de una forma sencilla, clara y, sobre todo, muy cómica el asunto de estos bichitos que aparecen, casi de la nada, invadiendo las cabezas de nuestros niños. Precisamente por tratarse de un tema tan delicado, los peques no siempre encuentran la justificación, temiendo ser el centro de las burlas de sus compañeros o, incluso, ser cuestionados de sus hábitos higiénicos.
Por eso es importante que sepamos explicarles que suele suceder a muchos niños y, en la mayoría de los casos, nada tiene que ver con el aseo o la limpieza. Así que para hacerlo mucho más fácil, «¡Mucho ojo con los piojos!» nos cuenta la historia de Leo, un niño que un día se da cuenta que en su cabeza han venido a visitarlo un montón de pequeños bichitos que le causan un picor enorme. Pero por más que se rasca parece que el picor no se calma. Y es que los piojos se han puesto a jugar en su cabeza.
El autor de esta divertida historia es el británico Giles Adreae y las ilustraciones de Jess Mikhail. En España ha sido editado por Ediciones Bruño.
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