Lectura intensiva: ¿cómo influye en la comprensión lectora?

Existen distintas experiencias de lectura que se complementan mutuamente. La lectura intensiva es un formato utilizado en el aprendizaje de un idioma. Parte de la selección de un texto breve en el que el lector pone el foco de atención. Es decir, se lleva a cabo un análisis detallado de su contenido. El alumno puede profundizar en el tema central.

También identifica aquellos términos que desconoce para clarificar su significado. En ocasiones, el propio contexto puede convertirse en clave para deducir el sentido de palabras nuevas. A pesar de ello, se recomienda utilizar el diccionario para consultar cualquier dato.

Características de la lectura intensiva

Es habitual que en un texto que es abordado desde una lectura intensiva, aparezcan conceptos desconocidos cuyo sentido no se resuelve desde la referencia al contexto en el que se enmarca. La lectura intensiva analiza el texto como un todo en el que se perciben muchos detalles particulares. Es un proceso lento que se enriquece con varias relecturas a través de las que el lector adquiere una visión global de la información. Requiere de un alto nivel de atención y concentración. Por ello, alimenta la comprensión lectora, favorece el descubrimiento de otras palabras y de otros aspectos relacionados con la gramática. Es un tipo de proceso que está perfectamente integrado en el estudio de un idioma.

En el ámbito académico, una propuesta de lectura intensiva suele ir acompañada por una serie de actividades que profundizan en torno al contenido. La realización de los ejercicios pone el acento en la identificación de cuestiones que se integran perfectamente en el texto. Por ello, el trabajo posterior refuerza el nivel de comprensión lectora del tema analizado.

Los textos poseen un nivel de dificultad con el que el alumno se siente cómodo. Pero, a su vez, plantean retos a superar que hacen posible el aprendizaje. Por ejemplo, el estudiante encuentra nuevos sinónimos y antónimos. Además, generalmente se trata de un proceso que está supervisado por el docente. En definitiva, los alumnos cuentan con el acompañamiento del profesor en el ámbito educativo.

¿En qué se diferencia de la lectura extensiva?

Es un tipo de lectura que precisa de un alto nivel de atención y concentración. Por ello, se centra en el análisis de textos breves. Es difícil mantener el mismo nivel de precisión con un libro de varias páginas que requiere de un enfoque diferente. En ese caso, la lectura es extensiva y se aplica en el descubrimiento de fuentes de información más desarrolladas. Por ejemplo, es un tipo de experiencia que facilita el encuentro personal con una novela. Y, en consecuencia, la lectura extensiva es esencial para desarrollar el hábito lector a largo plazo.

Por su parte, la lectura intensiva es clave para elevar la comprensión lectora. Ofrece un análisis tan detallado de un texto que requiere de un alto nivel de atención al detalle. El texto se descompone en unidades más pequeñas: párrafos, frases y palabras.

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