Lactancia problemática y depresión
El inicio de la lactancia materna no es, en muchos casos, tan bonito como nos lo venden. Lo más habitual es que madre e hijo necesiten un periodo de adaptación que dura más o menos según cada caso. Lo normal es que se supere y se consiga una lactancia satisfactoria. Según un estudio las mamás que tienen problemas en esos primeros dÃas son más propensas a tener depresión postparto.
Los autores no concluyen nada, si la depresión es origen de los problemas para instaurar la lactancia o si es al revés y las dificultades son las que propician la depresión. Tampoco tienen claro si las hormonas, implicadas en ambos procesos, serÃan las desencadenantes. Pero, parece que los problemas para iniciar la lactancia serÃan una señal de alarma de depresión, que los médicos deberÃan tener en cuenta.
Las madres con depresión del estudio eran más propensas a haber sufrido dolores graves en las primeras semanas de lactancia. Un 35 por ciento de las mamás con depresión y un 22 por ciento de las que no la tenÃan, afirmaron haber sufrido dolores la primera semana.
Además las mujeres a las que les disgustó amamantar a sus bebés, porque es algo que también puede pasar, eran un 42 por ciento más propensas a sufrir depresión que las que disfrutaron con la experiencia. Esto no quiere decir que la madre que no guste de dar el pecho a su hijo vaya a tener depresión, tan sólo es más propensa.
Quizá, y esto es mi opinión, el recurso tan usado de culpabilizar a las madres que no dan el pecho y la idealización de este acto, favorezcan que algunas mujeres se sientan frustradas si no disfrutan de la lactancia o no consiguen que esta sea exitosa lo antes posible. Esto junto al cóctel hormonal y una propensión a la depresión pueden hacer enfermar a alguna mamá. Veremos si avanzan los estudios sobre esta relación.
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Foto | Flickr-Desireefawn