Juguetes caseros: La Botella Mágica

Que los niños se diviertan no es una acción complicada. A menudo nos devanamos los sesos, y el bolsillo, para encontrar el juguete perfecto, el que esté de moda o el que impacta desde los anuncios de televisión, pero a menudo los pequeños no necesitan tanto lujo y si más imaginación.

Es por ello que aquí os presento un divertido juego al que hemos llamado la Botella Mágica, en otros casos también llamada la Botella Espía, y que hemos encontrado buceando por Internet, idea de una mamá que ha tenido que afilar muy bien su creatividad para mantener a los niños ocupados y entretenidos durante el verano. Sin duda es una idea genial que, además de divertir, también les ayuda a memorizar, aprender nuevas palabras y desarrollar su capacidad visual.

Los materiales que vamos a necesitar es una botella de plástico, de las de agua o refresco, arroz, lentejas, arena… y pequeñas piezas como botones, juguetes, broches, pendientes… cualquier pequeño objeto que pueda introducirse por la boca de la botella y que el niño pueda reconocer.

Antes de meter las piezas en la botella, las colocamos sobre una superficie y le hacemos una foto. Después, con un embudo vamos llenando la botella con los granos que hayamos elegido: arroz, lentejas… y paramos cada cierto tiempo para ir introduciendo las piezas. Así hasta llenar la botella.

Ahora sólo queda que el pequeño vaya moviendo la botella hasta encontrar todos los objetos. Hemos imprimido la foto de los objetos y tendrá que tachar aquellos que encuentre. Si hay varios niños se puede hacer una competición entre ellos. Cuando ya son más mayorcitos, podemos animarles a que busquen los de determinado color o los que empiezan por una u otra letra.

Vía | Elenarte

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