Los insecticidas domésticos y el daño cerebral en los niños
Es evidente que la exposición prolongada a productos químicos y tóxicos es del todo desaconsejable en el ser humano. Mucho más si ese ser se está desarrollando o apenas tiene unos años de vida. No debemos olvidar que todos nuestros órganos y conexiones neuronales, se van consolidando durante este primer periodo de nuestra existencia, por lo tanto es fundamental que este libre, al máximo, de cualquier agente contaminante.
Han sido muchos los estudios que se han realizado entre la exposición de productos químicos durante el embarazo, y posteriores problemas de salud en los bebés. Uno más viene a sumarse a esta larga lista. En este caso nos llega desde Francia donde nos aseguran que la exposición a ciertos insecticidas domésticos o utilizados en agricultura ralentizan el desarrollo cerebral de los niños.
Se trata de los piretroides, una sustancia química derivada de otra natural encontrada en los crisantemos, y que podemos encontrar en más de 3.500 productos de uso común, especialmente en insecticidas contra las cucarachas, pulgas, piojos o artículos para animales domésticos como los perros o gatos. Estas sustancias se pueden reconocer porque utilizan la terminación «trina» como bifentrina, permetrina y cipermetrina.
Y en relación a ellos nos llega este estudio francés en el que se han evaluado las capacidades cognitivas a más de 280 niños que han estado expuestos, a lo largo de su infancia, a este tipo de pesticidas. La presencia se la han encontrado en la orina, comprobando que aquellos cuyos niveles eran más altos presentaban mayor dificultad a la hora de expresarse verbalmente o menor capacidad para memorizar nuevos conceptos.
Vía | Diario Vasco
Más Información | Mercola
Foto | El desinsectador y desratizador