Ideas para decorar una habitación Montessori
La esencia de la educación Montessori también está presente en la decoración del dormitorio infantil. La distribución del mobiliario es clave para propiciar la autonomía del peque en su interacción con el entorno. De este modo, el propio espacio promueve el desarrollo infantil y el descubrimiento. En consecuencia, la habitación se convierte en el escenario ideal. Un universo cómodo y seguro para jugar y explorar el contexto.
El legado de María Montessori sigue inspirando a muchas familias en la actualidad. ¿Cómo decorar una habitación Montessori? En El Blog Infantil te damos algunas ideas.
1. Cama de baja altura para un buen descanso
La cama es un mueble esencial para disfrutar de un buen descanso. El mueble elegido debe potenciar no solo la comodidad infantil, sino también la libertad de movimiento. Un modelo de baja altura posee la disposición ideal en relación con el suelo. Un formato que hace posible que el niño se levante o se acueste de forma sencilla. Las camas infantiles con una estructura en forma de casita marcan tendencia.
2. Librería Montessori: un universo literario
Una librería baja integrada por varias baldas que exponen la portada de algunos libros infantiles. De este modo, el niño puede elegir qué cuento prefiere leer en cada momento. Uno de los aspectos que identifica visualmente a una librería Montessori es este: la forma en la que se colocan los ejemplares sobre las estanterías. La librería se convierte en un escaparate que muestra una selección de títulos que potencian la animación a la lectura.
Los libros no están colocados de lado, sino de frente. Utiliza la estantería para crear un rincón literario. Los cuentos Montessori alimentan la creatividad desde el encuentro con lo real. El contenido de las obras muestra con sencillez situaciones de la vida cotidiana.
3. Una pequeña alfombra para enmarcar una zona del dormitorio infantil
La alfombra, como puedes observar en numerosas fuentes de inspiración, es un complemento frecuente en la decoración del hogar y también forma parte de un espacio Montessori. Es un accesorio ideal para enmarcar una zona de juegos o de creatividad. La textura del producto aporta una mayor calidez en el dormitorio durante el invierno.
4. Espacio de almacenaje para guardar los juguetes
Previamente, hemos comentado que los ambientes Montessori están especialmente preparados para propiciar la autonomía infantil. Y el orden es un concepto esencial en el contexto. Cuando existe una óptima planificación, cada elemento ocupa su lugar. La estructura de una estantería, un mueble bajo o un organizador de juguetes ofrece espacio para guardar el material.
Los juguetes Montessori están elaborados en ingredientes naturales como la madera. Los muebles bajos del dormitorio infantil, a su vez, pueden estar acompañados por otras soluciones de almacenaje tan prácticas y sencillas como las cestas de mimbre y las cajas.
5. Armario abierto para organizar la ropa de cada temporada
¿Cómo organizar la ropa del niño? El armario ropero es un mueble básico en la composición de una habitación. Sin embargo, conviene seleccionar un diseño que esté adaptado a la altura del peque. De este modo, dispone de más autonomía para vestirse. A través de este sencillo ejemplo puedes observar que un entorno adaptado atiende las principales necesidades del niño en esta etapa de su vida.
Y el desarrollo de su autonomía fortalece su autoestima. El armario infantil abierto está de moda actualmente. Este tipo de mueble deja ver claramente qué prendas cuelgan de las perchas a diferencia de un armario con puertas que oculta el contenido que guarda en su interior. Es importante no recargar el espacio con un exceso de ropa o juguetes.
6. Varias láminas Montessori para adornar las paredes
¿Cuántos metros cuadrados tiene la habitación infantil? Analiza las características de la superficie disponible para crear un entorno infantil que sea práctico y acogedor. Las paredes adquieren una gran relevancia en la decoración Montessori. De hecho, es posible embellecer esta perspectiva del dormitorio con láminas que tienen un componente educativo.
Para que el niño observe el contenido de las láminas, estas deben estar situadas a la altura de sus ojos. Un artículo que no solo destaca por su valor ornamental, sino también porque alimenta la curiosidad infantil.
7. Escritorio infantil con una silla cómoda para el niño
El orden se percibe perfectamente en una habitación inspirada en el Método Montessori. La disposición del mobiliario permite crear un cuarto con zonas diferenciadas. La cama infantil, a la que hemos hecho alusión previamente, enmarca el lugar de descanso. La librería destaca el rincón de lectura. Y una mesa pequeña, acompañada por una silla cómoda, ofrece el confort necesario para dibujar, pintar y colorear.
Quizá el límite de espacio sea un inconveniente para sumar estos ambientes en un mismo lugar. En ese caso, es posible valorar otras alternativas. Como, por ejemplo, crear un rincón de lectura en otra habitación del hogar.
8. Combinación de colores para vestir el espacio
Un espacio de estas características transmite armonía, alegría, calma y equilibrio. Existe una conexión entre el todo y los componentes particulares. Un entorno agradable que no solo está formado por un mobiliario práctico y funcional, sino también por el uso de colores que producen este efecto. Los tonos claros ofrecen numerosos beneficios, entre ellos, crean una base decorativa muy versátil. Además, aportan un look atemporal. De este modo, podrás implementar pequeños cambios con la llegada de la temporada de otoño-invierno o durante la primavera-verano. ¿Cómo añadir un tono más llamativo en una habitación Montessori? Intégralo en proporciones muy pequeñas mediante algún complemento o accesorio que marque un contraste.
Por tanto, un espacio Montessori potencia la autonomía del niño y su capacidad para realizar actividades cotidianas acordes a su edad. Para ello, es importante que observes el espacio desde la mirada infantil para crear un lugar adaptado a la etapa de crecimiento en la que se encuentra. El proyecto de decoración debe estar perfectamente alineado con las necesidades del peque. El método Montessori puede convertirse en el hilo conductor principal que guíe el proceso creativo. Pero también puedes reinterpretar únicamente aquellas ideas que te gustan más para integrarlas en el dormitorio de tu hijo.
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