Horóscopo chino: Buey

El segundo animal que acudió, según la leyenda, a despedir a Buda tras su paso por la tierra fue el buey, de este modo le corresponde ser el siguiente, tras la rata, en ocupar el elenco de animales que conforman el horóscopo chino.

Siguiendo las cualidades de este animal, los niños nacidos bajo el signo del buey serán extremadamente cariñosos y pacientes, mostrando una tranquilidad innata que sabrán transmitir a todos los que le rodean. De todos modos, ese mar en calma que suele ser su personalidad, puede transformarse en una furia incontrolada cuando se cansan de soportar situaciones con las que no están de acuerdo.

Su mayor defecto es, sin duda, la cabezonería y la obstinación. Ahí es donde los padres han de estar bien atentos a fin de corregir ciertas aptitudes que les llevan a querer mandar e imponer sus gustos sobre los demás. Todo esto viene dado gracias a la gran seguridad que tienen en sí mismos, algo que le reportará grandes beneficios siempre que no se desborde su egoísmo.

Acepta, de buena gana, los horarios, las planificaciones y las ordenes, aunque no siempre esté de acuerdo con ellas, su alto sentido de la privacidad le impedirá, a menudo, mostrar sus verdaderas opiniones. Suele ser un estudiante ejemplar y raramente entra en conflicto con los profesores o compañeros destacando, sobre todo, por su implacable seriedad, por lo que nunca está de más que, de vez en cuando, se le estimule para desarrollar el sentido del humor.

Los niños buey son aquellos que han nacido en los siguientes años: 1901, 1913, 1925, 1937, 1949, 1961, 1973, 1985, 1997, 2009.

Vía | Xoomer Virgilio
Dibujo | Guía Infantil

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