Halitosis infantil ¿qué la produce?

Cuando hablamos de halitosis o mal aliento, casi de forma inmediata lo asociamos con un problema único de adultos. Sin embargo, aunque no suele ser especialmente habitual, también lo padecen los niños. Generalmente se trata de un proceso pasajero, aunque si está relacionado con algún mal hábito de higiene, de no corregirlo puede quedarle perpetuado en el tiempo.

Es necesario que si notamos que el aliento de nuestro niño huele de forma desagradable, investiguemos para conocer su causa. En la mayoría de veces está asociado con una mala higiene dental aunque también puede deberse a otras causas. Dependiendo de qué se trate, así podremos poner la solución adecuada.

Causas del mal aliento en los niños

Las más comunes suelen ser:

• Higiene bucal. Es importante que, desde bien temprano, enseñemos a nuestros niños a cepillarse muy bien los dientes invirtiendo el tiempo necesario. Usar de forma habitual el hilo dental y los enjuagues ayuda a mantener unas piezas dentales perfectas y las encías sanas. Si se acumula placa, con las dañinas bacterias, puede crear mal aliento, además de otros problemas más graves. Importante también enseñarle a cepillarse la lengua, allí puede encontrarse mucha suciedad escondida que provoca este problema.
• Boca seca. No producir suficiente saliva puede hacer que el aliento huela mal, se trata de un problema llamado xerostomía. Es importante que beba mucha agua.
• Respirar por la boca. En procesos gripales, si tiene vegetaciones o sufre apnea del sueño, la nariz queda totalmente taponada obligando a tener que respirar por la boca. Este proceso hace que la boca se reseque y, por lo tanto, produce menos saliva lo que hace que no arrastre las bacterias y produzcan mal aliento.
• Infecciones. Cualquier problema de salud que el niño presente en la boca puede transformarse en halitosis. Si ha tenido que ser intervenido con cirugía, si le han salido llagas o está pasando un proceso infeccioso en la boca, pueden ser la causa de ese mal olor que aparece en su cavidad bucal.
• Un objeto extraño. A veces puede pasar, especialmente si todavía son muy pequeños, que los bebés se metan en la boca o en la nariz un pequeño objeto que quede alojado y no nos demos cuenta. Una legumbre, un trocito de esponja, un pequeño juguete… Tenerlo demasiado tiempo sin darnos cuenta, hará que entre en un estado de putrefacción provocando el mal olor.
• Alimentación. Existen ciertos alimentos que provocan mal aliento: ajo, cebolla o ciertas especias.
• Medicamentos. Hay algunos medicamentos que al entrar en contacto con nuestro organismo pueden tener una reacción desagradable en cuanto al olor. No olvidemos que están compuestos por sustancias químicas que no siempre desprenden buen aroma.
• Enfermedades o problemas de salud. Amigdalitis, sinusitis, procesos infecciosos en cualquier parte de su cuerpo e, incluso, las alergias, pueden ser causa de mal aliento en los niños.

Soluciones para el mal aliento infantil

• Acudir al médico. Es, sin duda, el primer paso que debemos realizar ya que tras esa halitosis se podría esconder otro problema más serio. Una infección, un objeto escondido u otro tipo de enfermedades. Además él sabrá aconsejarte para eliminar esa molestia en tu peque.
• La limpieza bucal. Suele ser la causa más frecuente, así que debes enseñar a tu hijo a que extreme la limpieza, le dedique el tiempo y las herramientas necesarias sin olvidarse de dar un buen repaso a la lengua.
• Alimentos que evitan la halitosis. Una dieta rica en fruta y verdura ayuda a tener un aliento más fresco. Alimentos crujientes como las peras, manzanas o zanahorias ayudan, además, a producir saliva y evitar el problema de la boca seca. La menta, la canela o los yogures sin azúcar también son buenos aliados.

Vía | Bekia padres
Fotos | Freepik – asierrelampagostudio y Cuida tu boca

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