Las guarderías ¿culpables de las sibilancias en los bebés?

Las sibilancias son esos pitos o extraños ruidos que se forman en el pecho de nuestro bebé y que se producen cuando el aire pasa por los bronquios. Es normal que, de forma esporádica nuestro pequeño sufra este tipo de sonidos, especialmente cuando se ha acatarrado o ante cualquier problema pasajero de salud relacionado con las vías respiratorias, pero si le sucede de manera habitual, entonces estamos ante un problema que hay que tratar con más detenimiento.

Según los expertos pediatras, las sibilancias siguen siendo uno de los problemas más habituales por los que los padres acuden a la consulta de urgencias y, más allá de los antecedentes familiares o los problemas de salud grave que pueda presentar nuestro niño al nacer, la causa puede verse incrementada con la asistencia a las guarderías, según ha explicado Javier Pellegrini, vicepresidente de la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria.

El mayor problema es cuando estas sibilancias se van repitiendo, de manera casi continuada, durante todo el proceso de desarrollo del bebé, lo que condiciona su estado de salud futuro. Aunque en un principio no tengan mayor importancia, les puede provocar asma crónico a entre los 2 y 4 años. Por eso es necesario mantenerlos vigilados y a ralla.

Pero aunque la asistencia a la guardería puede aumentar el riesgo de que nuestro pequeño sufra estos molestos «pitos», también existen otros motivos que resultan determinantes. Uno de ellos, por ejemplo, es haber sufrido un constipado entre los primeros tres meses de vida. El embarazo también es un momento en el que, dependiendo de nuestros hábitos, podemos influir en su desarrollo, por ejemplo si padecemos asma, o si fumamos y ahora, también, puede influir la toma de algunos medicamentos.

Vía | Infosalus
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