La falta de ácido fólico en el embarazo provoca anomalías en la lengua del bebé
Uno de los nutrientes fundamentales en el embarazo, y que inciden directamente en el desarrollo del bebé y su futura salud es el ácido fólico. Aunque se encuentra en muchos alimentos que tomamos cada día, es imprescindible que durante el periodo de la gestación la dosis sea mucho más elevada, por lo que nuestro ginecólogo nos recomendará tomar un suplemento nutritivo.
El efecto negativo más inmediato, y conocido, de la falta de ácido fólico en el embarazo son las malformaciones del tubo neural y, por lo tanto, problemas tan graves como la espina bífida. Sin embargo, las investigaciones siguen sucediéndose para descubrir más efectos adversos sobre la falta de este nutriente como son el autismo, hipertensión o, incluso, parto prematuro. Ahora, un nuevo estudio ha comprobado como la falta de ácido fólico puede provocar anomalías en la lengua del bebé.
Disminución en el tamaño de la mandíbula y la lengua
Se trata de una investigación realizada por la Universidad Complutense de Madrid, en colaboración con la FEN, el Instituto de Salud Carlos III de Madrid, así como las Universidades de Pamplona, Granada, Las Palmas, San Pablo CEU y Politécnica de Madrid. Este trabajo ha sido publicado en la revista «Nutrients» y en él se especifica como, tras un laborioso trabajo con ratones de laboratorio, se ha descubierto que la falta de ácido fólico en el embarazo provoca anomalías en la lengua del bebé.
Según los autores de este trabajo, este nutriente interviene de forma directa en aquellos procesos en los que las células necesitan renovarse constantemente, como las que aparecen en el torrente sanguíneo o en las del crecimiento, sobre todo en el fetal. Es así como descubrieron que aquellas hembras gestantes con escasez de ácido fólico, tenían bebés con una disminución del tamaño del área de la cabeza y de la lengua.
Ausencia de lengua o muy pequeña
Estas anomalías iban incrementándose según se iban cumpliendo semanas de embarazo con ausencia de este nutriente. Las anomalías que se presentaban eran: microglosia, lengua pequeña, en un 7,6 por ciento; y aglosia, ausencia de lengua, en un 3,3 por ciento. Estas malformaciones venían acompañadas, además, de problemas de mandíbula, tanto por la ausencia de ella como por ser demasiado pequeña.
A tenor de los resultados, los expertos piden que estas anomalías físicas se unan a la larga lista de problemas de salud que provoca la escasez del ácido fólico, durante el embarazo, en el desarrollo del bebé. Y de este modo crear políticas de prevención para evitar que las mujeres embarazadas olviden la importancia de este alimento.
Vía | El economista
Fotos | Pixabay y Revista Moi
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