Fábulas para niños: 5 beneficios de estas historias

La fábula es una de las propuestas literarias que entretiene a los niños. Esta composición breve pone el acento en el comportamiento moral. El desenlace de la historia deja una enseñanza sobre el obrar correcto. Otra de las características de una fábula es la personificación. Esta es una figura literaria que enriquece la escritura.

A través de este recurso, el autor atribuye características y cualidades humanas a aquellos animales que protagonizan la historia. De este modo, los sentimientos, las emociones y los pensamientos están muy presentes en el argumento. Los objetos también adquieren vida en el contexto de una fábula. ¿Cuáles son los beneficios que esta composición aporta a los niños?

1. Brevedad y síntesis

Las actividades de animación a la lectura ponen en valor distintos medios creativos para despertar el interés por los libros en los niños. Las historias breves son especialmente interesantes por su extensión. No es necesario dedicar mucho tiempo al descubrimiento de una narración que, por sus características, es comprensible para el público infantil.

La brevedad también invita a releer una historia que muestra nuevos matices en revisiones posteriores.

2. Moraleja y enseñanzas morales

Toda fábula sintetiza una enseñanza que tiene un sentido para la vida. Es decir, la lección aprendida a través del relato es aplicable a la propia existencia. Este recurso educativo forma e inspira. La bondad se diferencia claramente en un texto de este tipo en el que la conclusión es nítida.

La reflexión en torno a dicha moraleja aporta tiempo de calidad en familia. La comunicación sobre este tema fortalece los vínculos afectivos. Las acciones producen efectos y consecuencias. Esta es una de las lecciones que queda de manifiesto en el transcurso de la historia.

3. Lenguaje sencillo para enriquecer el vocabulario

Como hemos comentado previamente, la fábula transmite valores al lector. Y lo hace a través de un lenguaje sencillo que facilita la comprensión del argumento. El lenguaje no solo resulta claro por el tipo de palabras empleadas, sino también por la utilización de ejemplos. La propia historia ejemplifica una situación concreta.

4. Imaginación y creatividad

Las fábulas tienen una conexión constante con la vida al describir situaciones con las que el lector puede identificarse. Pero la creatividad está muy presente en un relato en el que, como hemos comentado, cualquier objeto adquiere vida propia en el contexto de la trama.

5. Memoria

No es posible recordar todos los detalles de un libro de varias páginas. La fábula tiene una estructura que permite revivir en lo esencial el contenido de esa historia de principio a fin. De este modo, las fábulas alimentan la tradición oral gracias a relatos que se comparten de generación en generación.

Las fábulas para niños son breves, sin embargo, su potencial de sabiduría es inagotable. Esta es una de las razones por las que este género literario evoluciona a lo largo del tiempo. El público de las fábulas es intergeneracional. Es decir, abuelos, padres y niños disfrutan con este contenido sencillo, pero sorprendente.

¿Qué otros beneficios de estas historias breves para niños y niñas, quieres añadir en El Blog Infantil?

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