La enfermedad de Hirschsprung o megacolon congénito en el recién nacido
Hace unos días hablábamos del meconio, que son las primeras heces que expulsa el bebé durante las siguientes horas al nacimiento, y de como se puede complicar en el caso de que el bebé lo tire en el mismo vientre antes de nacer. El meconio es el síntoma de que su sistema digestivo funciona bien y es capaz, por sí mismo, de adaptarse a su nuevo sistema de alimentación. Por eso si a lo largo de las 48 horas siguientes el bebé no expulsa este desecho, habrá que revisarlo con más profundidad no sea que padezca la enfermedad de Hirschsprung o megacolon congénito.
La enfermedad de Hirschsprung o megacolon congénito es una enfermedad del intestino que aparece en 1 de cada 5 mil recién nacidos, siendo su incidencia mucho más elevada en los varones que en las hembras, aproximadamente en un 75 por ciento.
La enfermedad consiste en la incapacidad de que el intestino del bebé expulse, por sí solo, las heces. Esto es debido a que no ha desarrollado las células ganglionares responsables de los movimientos peristáticos, que son aquellos que realiza el intestino para la expulsión de los desechos digestivos. Aunque no se ha determinado con precisión cuales pueden ser las causas, si se cree que es meramente genética, ya que está mucho más presente en aquellos bebés cuyos padres o familiares hayan podido padecerlo.
La solución es una intervención quirúrgica que pasa por dos fases: la primera, llamada colostomia, consiste en cortar la parte enferma del colon del bebé y sacarla por el abdomen para que pueda evacuar sin problema. La segunda, llamada anastomosis, consiste en unir la parte sana del intestino al recto del bebé para que la evacuación vuelva a hacerse, como corresponde, por el ano.
Aunque es lógico que al principio se sentirá algo molesto, una vez operado por segunda vez, la recuperación será rápida, pudiendo hacer vida normal casi de inmediato.