El bebé y los abuelos

La relación que se establece entre nuestro bebé y sus abuelos es muy importante para su desarrollo emocional posterior. Es interesante que ya, desde sus primeros días, nuestra criatura se encuentre acogido en un mundo familiar donde se le quiere y respeta. Para ello, la figura de los abuelos, supone un nexo que se amplía más allá de los propios padres.

La imagen general que se tiene de nuestros mayores, suele darnos un resultado de seres indulgentes en exceso que malcrían a sus nietos concediéndoles todo tipo de caprichos. Pero no siempre es así. Según los psicólogos existen distintos tipos de abuelos que describen su modo de participar en la familia. Veamos algunos.

El Tradicional: visita a los nietos con regularidad e intenta no ser muy dominante para no ser acusados de influir en su educación. El Juguetón: participa, juega, se lo lleva de paseo. Busca una relación basada en el amor mutuo El Autoritario: son los que se consideran el cabeza de familia y buscan que se les consulte todo. Y, por último, el Distante: son los que viven lejos o con los que se mantiene una relación fría.

Sea cual sea el estilo, no hay que olvidar que es una relación positiva para ambos. Para nosotros también supondrá un alivio extra cuando podamos contar con ellos en determinadas ocasiones. No hay que olvidar que los vínculos de amor son importantes para la salud emocional de nuestros pequeños.

Fuente I «Bebé Genial» del Dr. Richard C. Woolfson (Círculo de Lectores, 2001)

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