Con dos años y toca la batería
El niño del vídeo tiene apenas dos años, pero lo que hace impresionaría aunque tuviera seis o siete. Es cierto que la batería que escuchamos es del artista original, pero solo hay que fijarse en su mano izquierda para ver que este bebé es un portento. Y al final del vídeo se le escucha un poquito a él solo.
Con esa edad es muy complicado que un niño sea capaz de coordinar los dos brazos con soltura y mucho menos de forma independiente. Y el protagonista del vídeo lo hace. Lleva perfectamente el ritmo y el tempo de la canción. Yo que tengo un bebé de la misma edad, con bastante ritmo por cierto, y puedo comparar en directo, estoy impresionada.
Solo espero que tras esta demostración no haya un adulto forzando al niño. Porque facilitar experiencias a un bebé es muy sano, estimularle para que pruebe cosas nuevas y ponerlas a su alcance. También debemos observarles y podemos incentivar sus intereses y talentos innatos. Pero, en ningún caso debemos forzar al bebé. Es una forma de maltrato que por desgracia se ve mucho en padres que quieren tener como sea, futuros deportistas de élite o estrellas de la canción.
Hay una imágenes espeluznantes circulando por e-mail sobre los entrenamientos a los que se somete a niños muy pequeños en China para conseguir que sean gimnastas olímpicos en el futuro. No se si son actuales, pero sí que esas prácticas se utilizaron en varios países en años pasados. Consiguieron fantásticos resultados en el medallero y también destrozarles el cuerpo, el espíritu y la vida a muchos pequeños.
Foto | Flickr-Crazybarefootpoet