Distintas molestias en el embarazo, distintas dietas (I)
Es lógico que cada mujer viva su embarazo de forma distinta. Por mucho que queramos igualar y generalizar las vivencias, cada organismo, cada ánimo, es totalmente único y particular y, de igual modo, las molestias e irregularidades físicas que se nos presentan.
Problemas de estreñimiento, tensión, retención de líquidos o desajustes en el peso, suelen ser las más habituales, especialmente cuando la gestación está llegando a su término. Una forma de aliviar estas molestias es adaptar nuestra dieta a fin de sobrellevarlas mejor. Veamos algunos casos.
Si sufres de estreñimiento la mejor opción es aumentar la ingesta de líquidos. Dos litros al día pueden estar bien. Es importante visitar el aseo de forma regular y siempre a la misma hora, de este modo estaremos regulando el reflejo gastrocólico, que es el responsable de movilizar el intestino, también para ayudar en esta tarea, un vaso de agua recién levantada puede ser perfecto. Aumentar, también, las verduras y frutas y evitar aquellos alimentos astringentes como el arroz, el té o el limón.
Si tu problema es de ardor de estómago, lo mejor es que repartas tus comidas a lo largo del día, de este modo tomarás alimento más a menudo pero en menor cantidad. Mastica bien y con tranquilidad. No te tumbes recién acabada de comer y, siempre mucho mejor, si lo haces semi incorporada para facilitar la digestión. En el caso que notaras que ya empiezan a venir los ardores, un vaso de leche bien fría te ayudará a frenarlo o que, al menos, no sea excesivamente intenso.
Vía | Crecer Feliz
Foto | Embarazo Online