Dilatar durante el parto de forma natural
Uno de los peores momentos del parto (según mi opinión) es la dilatación porque es cuando más sufres las contracciones. El momento del parto si todo va bien no suele durar mucho. Como estás por fin empujando realmente sientes que la contracción sirve para algo, para ayudar a salir al bebé. En mujeres primíparas el proceso de dilatación puede durar horas.
Según los expertos lo mejor para ayudar a la dilatación es conceder a la mujer libertad de movimientos. Aunque puede que no en todos los casos sea posible ya que podría ser necesario la monitorización o los goteros, lo que puede dificultar los movimientos. Aún así cada vez son más los hospitales que intentan dotar a las embarazadas de una cierta independencia e intimidad.
Según la postura que adopte la mujer tendrá unos beneficios u otros. La posición de decúbito lateral es la mejor para descansar si las contracciones son muy fuertes. Permanecer de pie con las piernas separadas puede ayudar a que las contracciones sean más eficaces.
Si nos colocamos de rodillas podremos aliviar las tensiones en la espalda y abrir la pelvis. Adoptando la postura a las cuatro patas, con las rodillas y las manos en el suelo, puedes ayudar a aliviar el dolor lumbar y propiciar la rotación del bebé. Si se tiene una pelota de las de gimnasia puede utilizarse para suavizar el dolor de las contracciones.
Otro de los métodos naturales para favorecer la dilatación es sumergirse en agua caliente. Esto puede resultar un poco complicado si ya estamos ingresadas en el hospital. Ya hay algunos hospitales que permiten utilizar las bañeras de dilatación. Se cree que el baño ayuda a dilatar porque al sentirse más relajadas las mujeres bajan su nivel de adrenalina (culpable de endurecer el cérvix si se encuentra en niveles altos).
Vía | Eroski Consumer
Foto | Flickr-Luis Anzo