Desarrollo profesional en madres: 5 consejos para evolucionar

El nuevo año presenta un horizonte renovado a nivel personal, familiar, académico o profesional. Las nuevas páginas de la próxima etapa todavía están por escribirse.

El desarrollo profesional es un motor importante en la felicidad laboral. Eso no significa que las expectativas de trabajo sean uniformes y tengan la misma relevancia hasta la jubilación. También hay etapas en las que surgen otras prioridades que se perciben como más relevantes todavía.

Actualmente, existe un sentimiento frecuente en el ámbito laboral: el estancamiento. Una sensación que también condiciona a madres profesionales que sienten que se encuentran lejos de los logros que quieren conseguir. En Uno más en la Familia compartimos cuatro consejos para evolucionar:

1. Crea una estrategia viable que te ayude a avanzar

Los proyectos de desarrollo profesional no se alinean con un ideal. Se enmarcan en una realidad que está repleta de obstáculos, desafíos y dificultades. Pero el contexto actual también presenta numerosas oportunidades. Por tanto, diseña un plan que te ayude a avanzar más allá del punto en el que estás ahora.

2. Amplía el mapa de acción con nuevas opciones y posibilidades

Elabora una lluvia de ideas con aquellas acciones que crees que pueden ser efectivas para ampliar tu formación, enriquecer tu currículum, comenzar una oposición, potenciar tu nivel de empleabilidad, buscar un empleo o emprender un negocio. Invierte tiempo en el proceso. Intenta que la lluvia de ideas sea cuanto más completa posible.

Es probable que luego descartes o aplaces muchas de esas iniciativas. Sin embargo, el ejercicio produce un impacto positivo en la observación de la realidad. Te ayuda a poner el acento en tu capacidad para crear condiciones favorables para elevar tu desarrollo profesional.

3. Amplía tu formación para mejorar el uso de la tecnología

Actualmente, muchas oportunidades están condicionadas por el manejo de la tecnología. La formación en este ámbito pone a tu alcance recursos, medios y herramientas clave. El teletrabajo, el emprendimiento online, la formación a distancia o el estilo de vida de los nómadas digitales son varios ejemplos a tener en cuenta.

4. Alimenta tu mentalidad de crecimiento

No se trata de analizar la realidad, únicamente, en su perspectiva amable. Es decir, no ignores los obstáculos que pueden limitar el proceso de desarrollo profesional. Sin embargo, si ignoras los aspectos favorables, no amplías tu mirada más allá de las dificultades.

La mentalidad de crecimiento eleva tu implicación y tu compromiso en el desarrollo del plan de acción. Intenta ser flexible y adaptarte a escenarios diferentes.

5. Participa en otros grupos profesionales

El desarrollo profesional puede analizarse desde un enfoque individual. Es decir, los cambios positivos, que experimentes en tu carrera, van a producir un impacto significativo en tu vida familiar. Sin embargo, el desarrollo profesional también se alinea con el contexto social. Los grupos profesionales son esenciales para potenciar la colaboración, la innovación, la inspiración y el intercambio de información.

Una visión individualista eleva el sentimiento de soledad en instantes de dificultad. Por el contrario, los grupos profesionales aportan cercanía y acompañamiento en las diferentes etapas de la carrera laboral.

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