Desarrollo intrauterino
En todo el proceso de desarrollo intrauterino podemos distinguir tres etapas y dos de ellas tienen lugar durante los primeros tres meses del embarazo
Preembrionario (0 – 2 semana)
Comprende el transporte del preembrión a través de la trompa de Falopio (mientras van dividiéndose sus células llegando al estadio de mórula), la implantación en el útero (ya en fase de blastocisto) y la fase posimplantatoria inmediata.
Esta etapa ocurre antes de la primera falta menstrual, y por consiguiente, antes de que la mujer se entere de su embarazo. Si algo sucede mal en este período, como por ejemplo, que la mujer contraiga una inflamación pueden pasar dos cosas, que se provoque un aborto instantáneo o que el embarazo continúe normalmente sin ningún tipo de inconveniente.
Embrionario (3 – 8 semana)
En esta etapa se lleva adelante la formación de un embrión primitivo (gástrula) con tres capas celulares a partir de las cuales se forman todos los tejidos y todos los órganos del bebé: el ectodermo, que da lugar al sistema nervioso, y los órganos especiales de los sentidos, como los ojos y los oídos; el mesodermo, del que se derivan los huesos, los músculos, la sangre; el endodermo, que origina la capa que recubre la gran parte de los órganos internos.
Es una etapa muy importante. Todos los órganos y sistemas más importantes del bebé se encuentran formándose y pueden verse afectados si el feto se ve expuesto a enfermedades (como la rubéola), a las drogas, las radiaciones, a sustancias químicas y toxicas.
Fetal (desde la novena semana en adelante)
El embrión ya es considerado un feto y esta en la etapa de crecer y madurar. Los tejidos ya fueron creados y de ahora en más tendrán que madurar. Las alteraciones que pueden surgir en esta etapa pueden ser más leves y se traducen normalmente en retrasos de crecimiento a pesar de eso pueden aparecer otros problemas, como las alteraciones en el proceso madurativo de algún órgano.
Vía | Ser Padres Hoy