Cursos de inteligencia emocional para padres y madres
Padres y madres concilian su carrera profesional con su vida familiar. La formación no solo puede tener el propósito de adquirir nuevas habilidades para el trabajo, sino también de adquirir nuevos recursos para la vida. Los cursos de inteligencia emocional para padres y madres ofrecen una importante oportunidad de aprendizaje que conviene poner en valor.
1. Introspección
El vínculo con el bebé es muy importante, este lazo remite a la alteridad. Pero para que este lazo crezca y evolucione desde una base sólida también es positivo que el padre y la madre se conozcan a sí mismos. Es decir, pongan el foco en su mundo interior a través de la luz que ofrece la introspección como forma de autoconocimiento.
2. Poner nombre a las emociones
Las emociones son una expresión del propio vivir. Una persona experimenta emociones distintas a lo largo de un solo día. A su vez, una madre y un padre no solo pueden estar atentos a esta información emocional cuando la viven en primera persona, sino que también acompañan al niño en el descubrimiento de las emociones. Por ello, unas de las habilidades más importantes es identificar la emoción concreta, ponerle nombre.
3. Desarrollo de competencias emocionales
Los cursos de inteligencia emocional para padres y madres también ofrecen recursos de ayuda para que los alumnos aprendan y potencien las competencias emocionales que pondrán en práctica en la rutina cotidiana. Por ejemplo, la gestión emocional es importante en un momento de estrés.
Una persona puede sentirse desbordada por sus emociones en algún momento, sin embargo, adquiere una mayor preparación para gestionar aquellas situaciones que le ponen a prueba a través de la educación emocional.
4. Resiliencia
La realidad exterior y las circunstancias influyen a nivel personal, el ser humano no vive al margen de aquello que le ocurre. Sin embargo, una persona sí puede llegar a potenciar su fortaleza cuando se posiciona de una manera diferente ante los factores externos del presente.
La inteligencia emocional refuerza esta creatividad en quien observa la realidad tal y como es. Pero, además, diferencia entre aquello que puede decidir y aquello que trasciende a su propio control.
5. Empatía
Cuando llega un nuevo miembro a la familia, nacen nuevos vínculos y, a su vez, el propio vínculo de pareja también se actualiza con esta nueva circunstancia. Los vínculos familiares son más felices y estables desde el diálogo que parte de la empatía. Una habilidad que un ser humano puede aprender a desarrollar a través de la inteligencia emocional.
Por tanto, además de los cursos de preparación al parto, existen otras propuestas de interés para padres y madres. Cursos de formación especializados en materias concretas como la inteligencia emocional. ¿Qué otras oportunidades de los cursos de inteligencia emocional para padres y madres quieres añadir?
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