Cuidado con el uso de medicinas alternativas en niños

Cuidado con el uso de medicinas alternativas en niños

Escrito por: Sacra    14 febrero 2013    2 minutos

Todos conocemos remedios caseros, elementos de la naturaleza que nos ayudan frente a los dolores o distintas alternativas que pueden complementar o ayudar a que nuestras dolencias, o las de la familia, acaben calmándose o, incluso, desapareciendo. Esta práctica que, en muchos casos es inocua para el organismo puede convertirse en un obstáculo cuando la estamos acompañando con la ingesta de medicinas de la farmacología tradicional.

Según un estudio realizado en nuestro país, un 17 por ciento de los menores estarían siendo tratados con productos de la medicina alternativa o complementaria, especialmente para aquellas afecciones graves o continuadas, tales como asma o aquellas relacionadas con las vías respiratorias. Estas familias, que a su vez requieren los cuidados de la medicina tradicional, no informan al pediatra de aquellos productos que están administrando a los pequeños, lo que podría suponer un importante error.

Esta encuesta se ha realizado entre más de 1.700 familiares que acudían con los menores a urgencias de un hospital, de ellos el 17 por ciento manifestó que administraba medicina alternativa a los pequeños aunque no se lo había comunicado al pediatra. Tanto los responsables de este estudio como los profesionales de la salud, advierten que es importante que estos datos lleguen al médico que trata al pequeño, ya que hay sustancias que podrían interactuar, provocando distintas disfunciones, entre ellas restar eficacia al tratamiento.

Cierto es que la medicina natural nos ofrece estupendas alternativas con las que aliviar síntomas y dolores que pueden interrumpir nuestro día a día, pero también debemos tener especial cuidado con la salud de los niños. Siempre hay que consultar con médicos naturistas especialistas en este tipo de terapias y, si recurrimos a la medicina convencional, tener al pediatra informado sobre estas nuevas vías de curación. No debemos jugar con la salud, y mucho menos cuando se trata de la de los más pequeños.

Vía | El Mundo
Foto | Discovery mujer

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