Cuidado con la ingesta de cafeína en los niños

Cuidado con la ingesta de cafeína en los niños

Escrito por: Sacra    6 julio 2010    2 minutos

Cada vez que nombramos la cafeína, inevitablemente, nos viene a la mente una taza de café, pero lo que no sabemos es que esta sustancia se encuentra en más alimentos de los que, a priori, parece. El café, el té, los refrescos o el chocolate son algunos de los que mayor cantidad de cafeína contienen, pero también se puede encontrar presente en golosinas o helados y que, solapadamente, acabamos introduciendo en nuestro organismo.

La cafeína es una sustancia natural que se encuentra presente en más de 60 especies de plantas de todo el mundo. Además es la sustancia más estudiada ya que el ser humano la viene consumiendo desde hace siglos. Un adulto puede consumir al día un promedio de 200 miligramos mientras que en los niños se ha establecido una media de 50 miligramos. De todos modos siempre dependerá del organismo de cada cual y de su aceptación para conseguir unos resultados beneficiosos o no.

Según nutricionistas y médicos, el consumo de cafeína no es perjudicial, simplemente hay que ser sensatos y no llegar al exceso. Las consecuencias negativas que produce un elevado consumo son las mismas tanto para niños como para adultos: somnolencia, nerviosismo e, incluso, alteración en la tensión sanguínea. Un consumo habitual en niños puede provocar los mismos síntomas que los de aquellos que padecen hiperactividad.

Otros efectos negativos ante el consumo de cafeína en los niños son: les crea adicción, si habitualmente consumen refrescos que contengan esta sustancia, irán requiriendo más dosis cada vez, la falta de ella les provoca tensión, dolor de cabeza e irritabilidad. Les altera el sueño, según un estudio realizado entre niños consumidores de refrescos diarios, pierden a la semana una media de tres horas de sueño. En los adultos el exceso de cafeína eleva las posibilidades de padecer osteoporosis, aunque en los niños no está comprobado sí se cree que perjudica a la absorción del calcio por lo que podría existir un mal desarrollo de la masa ósea.

Vía | Hijos con salud

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