La cromoterapia: el poder beneficioso de los colores (II)

La cromoterapia: el poder beneficioso de los colores (II)

Escrito por: Sacra    23 julio 2009    2 minutos

Actualmente la cromoterapia se está utilizando para tratar y aliviar ciertas dolencias. En los niños, por ejemplo, según la tonalidad que presenten, puede ser un primer paso para ayudar en el diagnóstico. Así, por ejemplo, si presenta un tono amarillento podría indicar problemas hepáticos; terrosa, relacionada con la diabetes; un tono azulado puede indicar problemas respiratorios.

También se ha descubierto que, por ejemplo, añadiendo, en su toma de leche, colorante alimentario rojo en los niños que padecen raquitismo, estos mejoran rápidamente, ya que este color les ayuda a absorber con mayor facilidad los rayos ultravioletas. De igual modo se ha observado que los niños, desde bien pequeños, optan mayoritariamente y de forma innata por un mismo color. Así, después de observarlos se descubrió que los que utilizan el amarillo son niños muy dependientes de sus padres mientras que aquellos que prefieren el verde, son muy tranquilos y fáciles de manejar. Por eso es importante, como ya os hablamos en otra ocasión, de la elección de los juguetes según su color.

Pero veamos, ahora, detalladamente, las características principales que nos aporta cada color.

  • Amarillo. Estimula el sistema linfático. Es una buena ayuda para levantar el ánimo. También funciona bien en las patologías digestivas como, por ejemplo, los cólicos del lactante y ayuda a eliminar toxinas rápidamente. La parte negativa es que, al ser estimulante, puede poner nervioso al niño. Está demostrado que los niños que duermen en habitaciones decoradas en amarillo, lloran más.
  • Azul. Una habitación pintada de azul claro es la ideal para los primeros meses de nuestro bebé. Este color es relajante además de que potencia el sistema inmunológico. Además, según acaban de comprobar en la Universidad de Umea, en Suecia, tiene un gran poder descongestivo para los catarros.
  • Naranja. Es el color que regenera y levanta el ánimo. Al no ser tan agresivo como el rojo, es una buena idea pintar parte de su cuarto con este color ya que, al funcionar como estimulante, también ayuda al aprendizaje. Es uno de los colores a tener en cuenta cuando se produce el cambio de dieta en el pequeño, es decir cuando iniciamos el paso a los alimentos sólidos ya que combate el estreñimiento. Además supone una gran ayuda para el aparato respiratorio ya que ayuda a eliminar flemas y a mejorar los síntomas de la bronquitis o el asma.
  • Verde. Es el color que más presente está en la vida del bebé, ya que es el color de la naturaleza. Según los expertos, es un color neutral en cuanto a efectos biológicos, aunque juega un importante papel en el equilibrio metabólico.

Vía | Crecer Feliz

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