Las cremas de progesterona natural no ayudan contra la infertilidad

Las cremas de progesterona natural no ayudan contra la infertilidad

Escrito por: Sacra    5 septiembre 2012    2 minutos

Científicamente no se puede demostrar que las llamadas cremas de progesterona natural ayuden para el embarazo

Existen en el mercado una serie de cremas de progesterona natural que, según se comercializan sirven para aumentar la producción de progesterona en el cuerpo femenino, y de este modo evitar ciertos trastornos. Se venden como remedios infalibles para la menopausia, avivar el deseo sexual, regular la menstruación o ayuda para encontrar el embarazo en el caso de dificultades o infertilidad. Algo que, científicamente, no se ha demostrado.

La progesterona es la hormona que regula la menstruación en la mujer. Durante el embarazo resulta fundamental porque es la que prepara el endometrio para la implantación del embrión y la responsable, después, de mantener la vida de nuestro bebé durante los nueve meses de embarazo. Esta hormona la fabrica nuestro cuerpo directamente, pero hay casos en los que, por distintos motivos, nos encontramos con una escasez, llamada insuficiencia luteínica, y que nos impide llegar al embarazo.

Ante estos casos lo más habitual es el suministro de fármacos que contengan progesterona. Estos medicamentos, que solo se sirven con receta médica, suelen suministrarse por distintas vías a fin de que sean efectivos: geles, cremas vaginales, supositorios o inyecciones.

A diferencia de estas, recetadas y controladas por nuestro médico, existen las cremas de progesterona natural que suelen venderse sin receta en farmacias o herbolarios. Su componente activo es la diosgenina, un esteroide obtenido de la planta del ñame, y según dicen el cuerpo lo absorbe, convirtiéndolo en progesterona, algo que no ha podido demostrarse todavía. Además, su forma de aplicación es totalmente distinta, ya que mientras las farmaceúticas se aplican en la zona vaginal para que tenga un efecto directo, estas se recomienda aplicarlas en las zonas sensibles del cuerpo como las muñecas, piernas, abdomen o parte interior de los brazos.

Vía | Consumer
Foto | Moda ellas

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