La contaminación y el ruido del tráfico de la ciudad, perjudicial para el embarazo
Vivir en una gran ciudad tiene sus grandes ventajas pero, como contrapunto, sus importantes inconvenientes. El tráfico de las ciudades es constante con los graves perjuicios que aporta a nuestra salud. Vivir en una calle en la que el tránsito de vehículos es habitual, hace que los niveles de contaminación alcancen cotas preocupantes. Pero no sólo la contaminación atmosférica debe preocuparnos, también la acústica es relevante para nuestro organismo.
Aunque la época de la gestación no es un periodo de enfermedad, es necesario cuidarnos algo más de lo habitual para así asegurar que nuestro bebé tiene garantizado su bienestar. Nuevos estudios científicos han vuelto a poner de manifiesto lo sumamente perjudicial que resulta el tráfico de las grandes ciudades en la salud de la embarazada y, también, en la del bebé. Así nos lo muestra una investigación realizada a embarazadas danesas.
Vivir con mucho tráfico genera más problemas en el embarazo
Desde Dinamarca nos llega un estudio realizado a 73 mil mujeres de se país durante el embarazo. Es así como consiguieron encontrar que aquellas que vivían en grandes ciudades y en calles en las que el tráfico era intenso y constante, habían tenido más problemas durante la gestación que el resto.
El mayor riesgo se presentaba en la tensión arterial, llegando a ser más probable que padecieran preeclampsia. La preeclampsia es una afección grave que se produce durante la gestación y cuya máxima característica es la preocupante elevanción en la tensión arterial. Este descontrol en el torrente sanguíneo puede provocar problemas graves, tanto en la madre, como en el desarrollo del bebé, por lo que es necesario seguir ciertos cuidados con el fin de mantenerla controlada.
Contaminación en la sangre y ruido que aumenta el estrés
Con este estudio se ha podido comprobar que los contaminantes atmosféricos, es decir, esas partículas del combustible que quedan flotando en el aire, así como el elevado ruido, son totalmente perjudiciales para la salud de la embarazada, entre otros motivos porque son capaces de penetrar en el torrente sanguíneo provocando alteraciones graves que pueden desembocar en la preeclampsia.
Por su parte, el ruido provoca estrés, incluso aunque no seamos conscientes de ello. Este estrés también provoca distintos desequilibrios en nuestro organismo, siendo el más frecuente la elevación de la tensión arterial.
Vía | Ecologismos
Fotos | Pixabay – Free photos y Los bebés
un comentario
Quien lo hubiera pensado, una podría pensar que quizá el único efecto que sufriría el bebe seria sobresaltarse por los ruidos, pero el problema va mucho mas allá y de manera importante ya que la preeclampsia puede llegar a ser mortal para la madre y el hijo, seria bueno para las mujeres que estén en la situación de vivir cerca calles y avenidas muy transitadas y aeropuertos tomar medidas para insonorizar sus habitaciones o al menos reducir lo mas que se pueda la cantidad de decibeles que pueden percibir.