La contaminación en el embarazo, bebés de menor peso
Son numerosos los estudios, e investigaciones, que se han realizado para determinar cual es el impacto de la contaminación, en las grandes ciudades, y el embarazo. Hasta el momento se ha podido comprobar como este exceso de suciedad ambiental, especialmente provocada por el tráfico, tiene un efecto negativo en el desarrollo mental del bebé, además de un mayor riesgo de que el parto sea prematuro.
A estas evidencias, ahora, se suma un nuevo estudio, realizado en Gran Bretaña, que asegura que la exposición de la embarazada a la contaminación del tráfico, provoca un retardo en el crecimiento del bebé, por lo que aquellos niños que nacen a término, lo hacen con un peso inferior a lo que correspondería según su edad.
A mayor contaminación, menor peso en el bebé
Se trata de una investigación realizada en Londres y publicada en la revista «The BMJ». Aunque se ha tomado la capital británica como muestra, los investigadores aseguran que estos datos se pueden extrapolar a cualquier otra metrópoli europea, ya que los niveles de contaminación atmosférica, por desgracia, son similares.
Es así como un equipo de investigadores del Imperial College London tomaron como referencia los datos de los 540 mil bebés nacidos en Londres entre 2006 y 2010, al mismo tiempo que comprobaron los niveles de contaminación atmosférica y acústica que las madres tuvieron que soportar a lo largo del embarazo, dependiendo de la zona en la que vivían, trabajaban o se movían.
Se necesitan políticas medioambientales más eficaces
Los resultados fueron claros cuando se comprobó que a mayor nivel de contaminación en el aire, especialmente en partículas finas (PM2.5), existía el riesgo de que los bebés presentaran bajo peso al nacer y más probabilidades de ser pequeños para su edad gestacional. Para ello, y con el fin de no ofrecer datos erróneos, se tuvieron en cuenta todos los factores que pudieran acrecentar este riesgo como la edad de la madre o cualquier patología que sufriera, y que pudiera influir en el peso de su bebé.
Sin embargo no pudieron encontrar una asociación entre el ruido del tráfico y el peso del bebé. A pesar de ello, y dada la influencia negativa que la contaminación de la atmósfera provoca en la gestación, los expertos piden a los gobiernos a que realicen unas políticas medioambientales mucho más severas y eficaces. Con solo reducir un 10 por ciento los niveles de contaminación en Londres, se podrían evitar un 3 por ciento de nacimientos de bebés con bajo peso.
Vía | Redacción médica
Fotos |Revista Feel y Nuevo aire
un comentario
Muy buena informacion para los que somos futuros padres.
Muchisimas gracias!!