Consejos para estimular la creatividad de los niños

Consejos para estimular la creatividad de los niños

Escrito por: Sacra    10 junio 2009    3 minutos

Ya os hemos comentado que la creatividad es una capacidad innata en nuestro pequeño, así que, desde que son bebés, podemos ir fomentando en ellos esta capacidad intuitiva que le ayudará a ser un niño, y posterior adulto, más seguro de sí mismo y más capaz de enfrentarse a los avatares del mundo.

Cuando todavía son bebés les ayuda mucho la estimulación visual: mueve los dedos, cubre tu cara, destápala… Muéstrale, también, imágenes simples, fotografías, colores… Por eso colgarle un móvil en su cuna es muy importante y, mucho mejor si lleva un espejo en el que se le vayan reflejando distintas imágenes de su entorno. El resto de los sentidos se van estimulando de forma natural: tus caricias, los sabores, los olores o el tono de tu voz.

Una vez vaya creciendo va a ser en el juego donde consiga expresar y exponer al mundo sus dotes imaginativas y su potencial creativo. Esta práctica le ofrece al pequeño la posibilidad de desarrollar su fantasía y sus habilidades además, al tiempo que aprende, disfruta y se relaciona con los demás. El juego debe estar presente en todo lo que rodea la vida del niño. Y es por eso que, además, podemos ofrecerle diversas alternativas para fomentar esa capacidad creativa que tanto bien le harán en su vida posterior. Veamos algunas.

  • Las artes plásticas: los dibujos. El dibujo es una de las prácticas más extendidas en los pequeños. A los 15 meses nuestro niño es capaz de hacer trazos, mientras que a los 18 ya hace garabatos. Más tarde vendrán las formas circulares y rectangulares para mostrar otras formas que irá adaptando hasta representar a personas y objetos.
  • Leerle cuentos y poemas. Es importante que procures mantener, en todo momento, la atención del pequeño: cambia el tono de vez en cuando, crea alguna sorpresa, gesticula, muéstrale las ilustraciones y, de vez en cuando, hazle participar con alguna pregunta o un comentario. Los poemas, además, llevan un ritmo propio en la lectura que les encanta a los más pequeños.
  • Escucha música y baila. La música está presente en muchos lugares y situaciones de la vida, así la tenemos en casa, en un concierto para niños, al aire libre o a través de la televisión. Comparte con tu hijo el placer de escuchar música y de cantarla y, también, el de bailar. Es una actividad que les encanta ya que tienen la oportunidad de expresarse con todo el cuerpo.
  • Teatro, títeres y otros espectáculos infantiles. En la actualidad, los programadores de actividades culturales, parece que se están preocupando mucho más por el público infantil. Así es, más o menos, fácil encontrar en nuestra ciudad, representaciones teatrales dedicadas a los niños, sesiones de títeres, marionetas o magia. También podemos improvisar cualquier historia ‘dramática’ en casa. Los disfraces son un complemento ideal para desarrollar su imaginación.
  • Un mundo lleno de variedad. Mostrarle al niño las cosas que existen en el mundo y que son diferentes, es un gran pozo de inventiva e imaginación. Visitar el zoo o el circo para mostrarle animales distintos. Visitar ferias de otras culturas. Viajar, conocer monumentos, paisajes… Y, sobre todo, acompañarlo en sus descubrimientos será un estímulo perfecto para fomentar su creatividad.

Vía | El Bebé

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