Las consecuencias de consumir cocaína en el embarazo

Las consecuencias de consumir cocaína en el embarazo

Escrito por: Belén    6 febrero 2011    2 minutos

Cualquiera con dos dedos de frente puede deducir que si la cocaína provoca daños en un organismo adulto, mucho más puede hacerlo en un bebé. Eso lógicamente incluye a los que aún están dentro de sus mamás y a ellas mismas. Según una revisión de 31 estudios realizados entre 1966 y 2009, publicada en el American Journal of Obstetrics and Gynecology el consumo de cocaína aumenta las posibilidades de tener un bebé con bajo peso y un parto extremadamente prematuro.

Se considera que un bebé nace con bajo peso cuando lo hace con menos de 2.500 gramos. La media de bebés con bajo peso es de uno de cada diez, entre las madres que no consumen cocaína. Entre las que lo hacen, el riesgo aumenta a uno de cada tres. El bajo peso no supone sólo que sea un niño pequeño, también puede indicar un menor desarrollo cerebral, entre otras cosas. Son bebés con mayores dificultades para comer y más propensos a las enfermedades en el primer año de vida.

Pero, además, uno de cada tres niños que nacen de una madre consumidora, lo hace antes de la semana 37 de gestación. En la población general los prematuros son uno de cada ocho partos. Los bebés prematuros y nacidos con bajo peso para su edad gestacional, tienen un mayor riesgo de sufrir problemas de salud, tener un cociente intelectual bajo, retraso en el crecimiento, hipertensión, problemas de corazón y muerte prematura.

Los autores analizaron los datos sin un límite mínimo de consumo. Como en el caso del alcohol, no hay una cantidad de cocaína segura para el feto. Si tienes un problema de adicción, coméntalo con tu médico, sabrá darte las pautas que necesitas para poder superarlo e iniciar la vida con tu bebé de manera mucho más sana para ambos.

Vía | Medline Plus (en inglés)
Foto | Flickr-2H Photography

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