El comportamiento: la conducta desafiante (I)

El comportamiento: la conducta desafiante (I)

Escrito por: Jaime Gomez    25 abril 2012    2 minutos

Actitudes negativas a simples situaciones

Al igual que ese período de tiempo de dos a tres años, tenemos que ser protagonistas en la evolución del niño en relación a su confianza y desarrollo, también tenemos que estar atentos a los comportamientos más negativos, tales como los enfados, las pataletas, los llantos. Debemos estar preparados para afrontar los casos como el de la conducta desafiante.

Como en todo lo anteriormente mencionado, seguimos siendo parte fundamental en los avances de los niños. Al alcanzar la edad de dos años y caminando hasta los tres, empiezan a crecer en ellos diferentes tipo de sentimientos tales como la venganza, el orgullo, la culpa. Sentimientos que hay que canalizar de manera correcta para que no desemboquen en una perdida del camino correcto a elegir.

La manera de que afloren estos sentimientos es muy simple. El enfoque positivo puede surgir desde el conseguir que le compres un juguete hasta una simple galleta en la merienda. El negativo también se plantea con la misma simplicidad. La negativa al juguete o a recibir la galleta para la merienda, por ejemplo.

Las reacciones ante estas situaciones pueden ser variadas. Chapurrear palabras sin sentido, lanzar algún objeto contra la pared o el suelo, negativa a comer o dormir la siesta. La frustración que se refleja, deriva de la consecuencia de no conseguir el objetivo que él se había marcado.

Para aprender a manejar esto, emite señales o palabras para encontrar nuestra complicidad. Debemos estar atentos a esto para que el sepa que cuenta con nuestro consejo y nuestra ayuda ante ello, aunque él, de forma independiente, busca la forma de solucionarlo. Se convence a si mismo que es capaz, sobre todo sabiendo que puede encontrar tu apoyo.

Via | Zerotothree
Foto | sxc-roxinasz

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