Cómo organizar las visitas después del nacimiento del bebé
Después de nueve meses de cambios, se produce el momento definitivo que marca el verdadero punto de inflexión en la vida de una familia: el nacimiento del bebé. Un cambio que puede extenderse a distintos niveles ya que se producen novedades a nivel emocional, en la rutina, en la relación de pareja, en la gestión del tiempo, en el vínculo contigo mismo y en la interacción con el entorno. En este momento de bienvenida, familiares y amigos también muestran su deseo de conocer al bebé para compartir con los protagonistas la ilusión de este escenario.
Sin embargo, en este contexto de cambio, el ingrediente de las visitas puede convertirse en causa de incomodidad o de estrés en ciertos horarios. Esto ocurre cuando los protagonistas se sienten desbordados por este hecho si los imprevistos en forma de visitas inesperadas son una norma habitual en el calendario. ¿Cómo organizar las visitas después del nacimiento del bebé? En Uno más en la familia te damos ideas para concretar este objetivo.
Comunicación asertiva
Conviene evitar el error de creer que los demás serán capaces de concluir el momento exacto de la visita. No existe la lectura de pensamiento. Tampoco existe una única manera de interpretar la realidad ya que cada persona vive la maternidad y la paternidad desde su propia historia y circunstancias. Por tanto, para clarificar cualquier duda y potenciar el objetivo de organizar las visitas después del parto con iniciativa, utiliza el recurso de la palabra y la amabilidad para transmitir el mensaje que para ti sea relevante en este momento.
Por medio de la comunicación escrita no solo puedes planificar el mensaje teniendo claro el objetivo del mismo, sino también releerlo antes de enviarlo para corregirlo si deseas cambiar alguna cuestión.
La importancia de la comunicación no solo se aplica a la interacción con el entorno de amigos y familiares, sino también a la propia relación de pareja puesto que en tal caso es positivo que ambos establezcan acuerdos sobre este tema. Quizá este fuese un tema ya abordado durante el embarazo desde la expectativa de la planificación, sin embargo, conviene actualizar esta conversación para centrar el propósito en el contexto vivencial del ahora. Este es uno de los temas de conversación para hablar en pareja durante el embarazo, pero también después.
Libertad interior
Existen condicionamientos que pueden limitar la libertad interior. Por ejemplo, el miedo al qué dirán. Ante esta interpretación que te lleva a dar más valor a la opinión de otra persona que a tu propio punto de vista es importante que cambies el foco de atención para observar qué es prioritario para ti en este momento. Mereces concederte la libertad necesaria de vivir esta cuestión desde tu propio criterio porque de este modo no solo cuidas de tu bebé, sino que también potencias tu autocuidado emocional.
Observa el horizonte temporal más allá de la inmediatez del corto plazo puesto que las personas de tu entorno tendrán la oportunidad de conocer al bebé a partir de un recurso tan significativo como el tiempo. Más allá del ahora, habrá nuevas ocasiones de futuro para este encuentro.
Entorno de confianza
No todas las personas tienen las mismas circunstancias. Aquellas que tienen un entorno más extenso tienen que dedicar más tiempo a planificar esta cuestión. Este es un momento de intimidad. Y no todas las personas tienen el mismo significado para ti. Puedes dar un mayor protagonismo a esos seres especiales. Al planificar las visitas, puedes concretar el horario de inicio y de fin de este encuentro para gestionar de antemano esta información que es importante para que las visitas no interfieran en la propia rutina del bebé. Clarificar este dato no solo puede ser positivo para ti sino también para quien te visita.
Desconexión tecnológica
La comunicación digital crea puentes de conexión con los demás incluso en la distancia. La gestión de las visitas puede estar en relación con el propio uso que los protagonistas hacen del teléfono móvil. Por ejemplo, conviene recordar que este instrumento es un medio pero en ningún caso es un fin en sí mismo. Para ello, el teléfono puede permanecer en silencio en distintos momentos. Además, también puedes tener en cuenta el consejo de quienes ya han vivido este tiempo pero teniendo claro que se trata de su historia, no de la tuya.
Por tanto, esta es una de las posibles causas de estrés posparto. Estas observaciones pueden ayudarte a planificar este momento, pero lo más importante es que encuentres tus respuestas escuchando tus emociones y atendiendo tus necesidades. Agradece el cariño de quienes desean conocer al niño y disfruta de la felicidad de visualizar este instante en el que se produzca ese encuentro. Pero más allá del tiempo marcado por el calendario, escucha también tu propio tiempo y el de tu bebé. ¿Cómo organizar las visitas después del nacimiento del bebé? Puedes compartir tu experiencia sobre este tema o tu punto de vista si lo deseas.
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