Cómo enseñarle a nadar a un bebé
Es muy importante que los niños aprendan, desde pequeños, a defenderse en el agua. Esto será una tranquilidad para la mayoría de los padres que sienten que su vida podría estar en peligro si caen accidentalmente en una piscina o en el mar.
En la siguiente entrada te contaremos como los bebés de más de un año ya tienen la capacidad de familiarizarse con el agua y así poder desarrollar o moverse sin ningún tipo de problema en un medio acuático.
Ventajas y desventajas de nadar desde bebés
Los expertos señalan que la natación es una actividad que permite estimular todo el aparato locomotor gracias a los ejercicios de psicomotricidad que pueden realizar. Seguramente los bebés que estén en contacto con el agua comenzarán antes a gatear, andar, moverse y comunicarse incluso con otros niños.
La natación es una actividad que permite estimular todo el aparato locomotor.
Son niños más despiertos y dispuestos a realizar otro tipo de actividades. Tengamos presente que cuando los niños aprenden a nadar no solo aprenderán a flotar sino que también pasarán un tiempo jugando en el agua, moverán sus piernas y tendrán un gran fortalecimiento en su parte dorsal.
Todos estos ejercicios ayudarán a un mejor desarrollo de su aparato respiratorio y corazón, la natación, todos sabemos, es una actividad muy completa, especialmente para los niños que se encuentran en un proceso de descubrir el mundo exterior.
Por otra parte, la natación ayudará a incrementar el vínculo emocional entre los hijos y los padres. Es una actividad que ayudará a que los padres dediquen un tiempo exclusivo para los niños en un ámbito relajante, los bebés sentirán este tipo de contacto y también lo aprovecharán. Los padres y sus niños estarán un tiempo felices y tranquilos en el agua, creando una relación muy especial y única.
Formas en que aprenden a nadar los bebés
Después de los 15 meses de vida el niño tendrá una mayor capacidad para familiarizarse en el agua, en esa etapa de la vida el aprendizaje será más rápido, porque aprenderán fácilmente y se podrán mover mejor en este nuevo ámbito.
Se empezará a ayudar a los bebés a sentirse bien en el agua, moviendo sus piernitas y sus bracitos. Comenzarán usando material de flotación que se comenzará a quitar este tipo de material. El niño tomará otra postura cada vez más horizontal y su postura mejorará.
A los dos años aún no llegará a nadar como lo hacen los adultos, esto requerirá cierto desarrollo psicomotriz que no podremos evitar.
Lo podrás llevar al niño a la piscina desde los pocos meses de edad para sentirse cómodos y se diviertan en el agua, además comenzarán a conocer las medidas de seguridad como la flotación de supervivencia y respirar sin tragar agua. También comenzarán a patalear mientras es sujetado firmemente.
Vía | Natación bebé
Foto | Pixabay – McStone
Comentarios cerrados