Cómo afecta a los bebés el cambio de hora de primavera
Existe un dato que está claramente vinculado con el establecimiento de hábitos: la hora. Horarios que describen la imagen de una rutina en familia. El cambio es una constante en la vida que, con la llegada de la primavera, también se manifiesta a través del gesto ya convertido en cotidiano de adelantar una hora el reloj. Un gesto propio de este fin de semana que, como ocurre con otros cambios, también produce una consecuencia. La sensación de incomodidad que genera el proceso de adaptación al nuevo contexto.
Los bebés, los niños y las personas mayores notan más esta experiencia del cambio. El cambio de hora implica una adaptación en gestos tan significativos como la alimentación, la siesta y el descanso. Este cambio de hora lleva a los protagonistas más allá de su zona de confort habitual del tiempo de otoño-invierno, una zona de seguridad que se actualiza con la referencia de este nuevo escenario de la primavera-verano.
¿Qué síntomas puede producir el cambio de hora de primavera en los bebés? Durante unos días, el niño puede mostrarse más irritable y cansado. El bebé puede necesitar más días para adaptarse a este nuevo ciclo que un adulto. ¿Cómo afrontar el cambio de hora de la primavera desde una perspectiva positiva? En Uno más en la familia te damos ideas.
Proceso de cambio gradual
La planificación gradual es una medida terapéutica para minimizar la sensación de cambio. Si no has emprendido esta anticipación en los días previos a este fin de semana puedes realizar este proceso de adaptación al cambio en esta nueva rutina también de manera gradual a posteriori.
Un bebé, a diferencia de un adulto, no conoce la información de este cambio de hora, sin embargo, su propio ritmo interno sigue alineado con el reloj previo. Aproximadamente, el niño necesitará en torno a siete días para adaptarse a este nuevo escenario. Como adulto, conocer este contexto estacional también puede ayudarte a comprender las sensaciones del niño en este momento observando este periodo en su contexto temporal.
A partir del ritmo propio del reloj biológico, es probable que el niño siga alineado con este tiempo previo. Un gesto que puede percibirse al comienzo de un nuevo día, cuando llega el momento de despertar y de comenzar la jornada. En ese caso, si el bebé despierta a la misma hora de siempre (solo que ahora dicha hora queda interpretada desde el nuevo cambio horario), espera unos minutos para acercarte. Puedes ir ampliando los minutos de manera progresiva durante esta semana para reforzarle positivamente en la adaptación al nuevo calendario.
Zona de descanso
El dormitorio es una zona de descanso y bienestar. Un lugar cuidado desde la perspectiva del interiorismo, el color, la seguridad del mobiliario seleccionado y la distribución del espacio. El dormitorio del bebé, además de ser un lugar de descanso, también es un espacio de juegos.
Las tendencias de primavera-verano no solo muestran las novedades en el sector de la moda, sino también en la decoración. Es habitual personalizar la casa con algún detalle propio de este tiempo. Existe un aspecto que puedes cuidar con motivo de este cambio de hora de primavera. Por ejemplo, reduce la luz en la zona de la ventana cuando el bebé duerme por la noche ya que este estímulo transmite la información de un nuevo día.
Vivir el cambio en familia
Padres y madres conviven con sus propias dificultades ante el cambio de hora. Conviene observar este proceso de adaptación al nuevo tiempo de la primavera no desde la perspectiva individual, sino desde la visión de conjunto ya que esta cuestión temporal es inherente a la propia vida familiar. A través de este objetivo vivido en equipo, es posible incrementar la motivación ante este proceso. En la medida de lo posible, es recomendable evitar otros cambios que pueden posponerse durante unos días justo en este momento del calendario para priorizar la atención hacia este objetivo principal.
Este proceso de cambio de hora puede observarse en el contexto positivo de una estación como la de la primavera que resulta tan feliz para los niños y para la familia. Esta estación de largas horas de luz solar y temperatura agradable invita a la socialización de los juegos al aire libre en los parques infantiles y en las zonas de paseo. Esta perspectiva temporal aporta un nuevo significado a este cambio de hora de primavera que afecta a todas las personas aunque a cada una de manera diferente porque cada ser humano y cada bebé es único.
Disfruta de este nuevo tiempo en familia y no olvides realizar este fin de semana el proceso de cambiar la hora del reloj recordando que no existe una única medida del tiempo: el reloj interno también es importante. A través de este proceso de adaptación al cambio, este reloj interno se alinea con el nuevo contexto temporal.
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