Comer verdura en el embarazo protege al bebé de la exposición química
Uno de los pilares fundamentales para que nuestro embarazo se desarrolle perfectamente y nuestro bebé crezca bien sano y sin mayores problemas, es la alimentación. Además de los suplementos que nos aconseje nuestro ginecólogo, es importante que nuestro menú esté lleno de alimentos frescos y sanos, aquellos que nos aportan todas las vitaminas y nutrientes necesarios para una dieta equilibrada y especialmente sana.
Y dentro de esos alimentos son fundamentales las verduras y las frutas, que si ya son necesarias en cualquier etapa de nuestra vida, mucho más cuando nos encontramos gestando a un bebé. Pero si encima descubrimos que la ingesta de estos alimentos tiene beneficios extra, entonces ya no hay duda de que se convierten en el mejor aliado para la salud de nuestro bebé.
Según una investigación publicada en Environmental Health Perspectives, aquellas madres que comen importantes cantidades de verduras y frutas durante el embarazo están protegiendo a su bebé de la exposición química de distintos elementos, concretamente de los hidrocarburos policíclicos aromáticos. Estos elementos contaminantes se producen cuando distintos materiales orgánicos no se combustionan por completo, como pasa con el tabaco, el combustible fósil o una parrillada. Estos elementos quedan suspendidos en el aire, siendo inhalados e ingeridos por el ser humano.
Según distintos estudios médicos, los hidrocarburos policíclicos aromáticos se relacionan con el aumento de la obesidad infantil, la depresión, la ansiedad o el déficit de atención. Pero tras estudiar a más de 600 mujeres embarazadas de distintos países de Europa, entre ellos Reino Unido, Dinamarca o España, entre otros, se comprobó que aquellas mujeres que comían verdura y fruta en importantes cantidades creaban una barrera de protección para su bebé, lo que impedía que estos elementos nocivos llegaran a influir en su salud.
Vía | Mamá natural
Foto | Óptica Lacalle