Comer mal durante el embarazo altera el cerebro del bebé

Son muchas las informaciones, investigaciones y estudios que se realizan en torno a las enfermedades que pueden acarrear los bebés desde el vientre materno. Si bien muchas de ellas son genéticas, otras vienen marcadas, o al menos con más probabilidades de suceder, dependiendo del hábito diario de las madres. Y dentro de esas costumbres o rutinas tenemos la alimentación, mucho más importante de lo que a priori se cree.

De hecho se acaba de realizar un estudio en la Universidad de Yale, en Estados Unidos, que ha intentado explicar porqué aquellos niños de madres obesas o diabéticas, salen, en la mayoría de los casos, con esa herencia. Si bien la explicación, hasta ahora, era que podría ser casualidades o algún trastorno genético, con esta nueva investigación se ha concretado que también influyen, y mucho, los hábitos alimenticios de la madre, sobre todo en los circuitos cerebrales relacionados con el metabolismo del bebé.

El experimento se realizó en roedores pero es totalmente idéntico en los humanos. De esta forma se comprobó como una dieta rica en grasas por parte de la madre, conseguía alterar esas conexiones en el bebé haciendo que su metabolismo variase, del mismo modo ocurría con la glucosa. De hecho se producían variaciones en su metabolismo tan grandes que las arrastrarían durante el resto de sus vidas.

Pero además en los seres humanos contamos con otra contrariedad, distinta los roedores. Estos animales siguen desarrollando el hipotálamo después de nacer, mientras que nosotros cumplimos el desarrollo durante los últimos meses de embarazo. Es por esto que resulta tan importante controlar la alimentación durante este periodo. Abusar de las grasas o los azúcares puede provocar tener niños obesos o diabéticos en el futuro.

Vía | ABC Blogs
Foto | Buytruht

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