Chistes infantiles para el Día de la Madre

Una de las cosas más hermosas que podemos regalar a nuestra madre es la felicidad. Claro que la felicidad no se puede envolver en papel de regalo, ni comprar en unos grandes almacenes, ni siquiera cocinar con chocolate y fresas. La felicidad es un estado emocional al que todavía nadie ha encontrado explicación y que aparece cuando menos te lo esperas. Eso sí, mantener una actitud positiva en la vida es algo que siempre nos va a ayudar para acercarnos hasta ella.

Y una de las cosas que reflejan un estado de ánimo relajado, sereno y predispuesto a encontrarse con ella es la risa. Y la risa nos la pueden provocar muchas cosas, entre ellas los chistes. Así que os he hecho una selección de esos cuentecillos graciosos que empiezan siempre con un «Mamá,mamá…», ideales para que celebremos riéndonos su gran día.

• -Mamá, mamá… ¿Las aceitunas tienen patas?
  -No, hija.
  -Entonces me he comido una cucaracha.
• -Mamá, mamá… ¿Castigarías a un niño que no ha hecho nada?
  -Claro que no, hijo.
  -Pues no me castigues, porque no he hecho los deberes.
• -Mamá, mamá… Los fideos se están pegando.
  -Pues por mí como si se matan.
• -Mamá, mamá… Me han suspendido en geografía porque no sé dónde está el océano Atlántico.
  -Eso te pasa por ser tan desordenado.
• -Mamá, mamá… En el cole me llaman despistado.
  -…Deje su mensaje en el buzón de voz.
• -Mamá, mamá… Dicen en el cole que tengo los pies grandes.
  -No hagas caso y guarda los zapatos en el garaje.

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