Características de los textos informativos para niños

El proceso de la lectura pone el acento en diferentes tipos de contenidos. Los textos informativos, como indica su propio nombre, transmiten información sobre un tema específico. El lenguaje utilizado es acorde a la edad del lector. El desarrollo de la propuesta tiene un hilo conductor. Es decir, profundiza en torno a un tema principal. Y, para ello, emplea diferentes ideas secundarias en la explicación.

Es un formato que realiza una exposición clara por medio de la aportación de datos objetivos y descripciones. Las cuestiones desarrolladas pueden girar en torno a una amplia variedad de cuestiones. Por ejemplo, es habitual que los textos informativos estén relacionados con cuestiones de actualidad que tienen su reflejo en revistas y periódicos. En ocasiones, se adentran en un suceso histórico. En otros casos, el argumento gira en torno a la biografía de un personaje célebre. En cualquier caso, explican un objeto de estudio.

Combinan texto e información visual

Los textos infantiles suelen combinar la parte escrita con dibujos, gráficos e ilustraciones. Es decir, la información visual clarifica lo expuesto en el contenido. El orden es uno de los ingredientes que podemos observar en la publicación. Y el orden realza la claridad y la comprensión. Las ideas están estructuradas en torno a un esquema central que está integrado por la introducción, el cuerpo del texto y la conclusión. El desarrollo de la idea principal se extiende durante varios párrafos que finalizan con un resumen.

Responden preguntas clave: qué, quién, cómo, cuando, dónde, por qué y para qué

Los niños se plantean numerosas preguntas que propician el descubrimiento del mundo. Y existen diferentes recursos que facilitan el acceso a datos contrastados. Los textos informativos, como puedes deducir del propio concepto, aclaran cuestiones esenciales. Por tanto, responden preguntas importantes en torno al tema central.

Algunas de las preguntas pueden estar iniciadas por las fórmulas mencionadas al comienzo de este apartado. Es decir, las respuestas aportadas contextualizan el tema tratado.

Uso de ejemplos y comparaciones

Los recursos estilísticos utilizados en la literatura infantil ponen en valor la importancia de la estética en la escritura. Es posible identificar metáforas, símbolos, onomatopeyas y aliteraciones (además de otras figuras). Sin embargo, los textos informativos utilizan otro tipo de herramientas. Por ejemplo, suelen aportar ejemplos, cifras y comparaciones que sirven para clarificar el asunto analizado.

Generalmente, los textos informativos para niños son breves

Y, por otra parte, están estructurados en párrafos cortos. El orden, como ingrediente esencial de un texto informativo, se percibe en la organización de las ideas principales y secundarias. Pero también puede comprobarse a nivel visual en la presentación de una publicación con un formato cuidado.

Finalmente, conviene puntualizar que un texto informativo prioriza la búsqueda de la objetividad en la forma de analizar el tema. Por ello, aporta datos, descripciones y cifras perfectamente contrastadas.

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