Cambiar el nombre al bebé ¿es posible?

Elegir el nombre de nuestro bebé no es una tarea fácil ya que lleva asignada mucha responsabilidad. No debemos olvidar que ese nombre va a ser, o al menos lo pretende, para toda la vida. Pero los padres no siempre se ponen de acuerdo, o una vez puesto se dan cuenta que no es todo lo bonito o adecuado para su hijo. Muchos son los motivos que pueden causar ese arrepentimiento, pero debemos tener en cuenta que cambiar el nombre de nuestro bebé no es sencillo.

En algunos casos es el padre el que elige un nombre, que no gusta a la madre, cuando va a inscribir al niño al Registro Civil. En otras ocasiones le ponemos el de un famoso al que admirábamos y ya no nos gusta. En otros, no lo habíamos pensado suficiente y su significado puede resultar hasta ofensivo, siendo el centro de las burlas. En cualquiera de los casos, el proceso para cambiar el nombre a nuestro niño puede llevarnos años.

Los jueces no suelen ser partidarios de cambiar el nombre de los niños, por eso los motivos tienen que ser muy sólidos y demostrados para que se pueda iniciar la gestión. Estas excepciones que contemplan los magistrados son: que el nombre sea difícil de pronunciar, en ese caso se adapta a la grafía de la madre. También si el nombre puede provocar burlas y herir los sentimientos del niño.

Pero en la mayoría de los casos en los que los padres quieren cambiar el nombre de su hijo es porque ha dejado de gustarles. En este caso deben demostrar que, al menos durante dos años, han llamado al niño con otro nombre, el mismo con el que lo han inscrito en la guardería, la biblioteca o la piscina, por ejemplo. En cualquier caso, el nombre no se puede cambiar hasta que el bebé ha cumplido ya los cinco años.

Vía | Guía Infantil
Foto | El rastrillo de mamá

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