El bol del que nunca se cae la comida

El bol del que nunca se cae la comida

Escrito por: Sacra    24 septiembre 2009    2 minutos

Sólo ha sido una décima de segundo, el gesto involuntario de un sutil parpadeo o ese leve e inoportuno descuido de mirar hacia otra parte justo cuando el puré aparece esparcido por la mesa. Los niños aprenden jugando y, dentro del amplio mundo del juego y la enseñanza, está la parte divertida de aprender a comer. Por eso es inevitable, por mucho que nos empeñemos, que las cucharas vuelen, las verduras acaben formando un lindo estucado en la pared de la cocina o el plato ruede y caiga sin más horizonte que el suelo.

Pero siempre hay alguien que acaba pensando en construir y comercializar objetos que, día a día, nos pueden resultar útiles y beneficiosos -sobre todo para nuestros nervios-. Imaginamos que alguna madre desesperada ha acabado diseñando este giroscopio que, por mucho que los niños intenten deshacerse de la comida, siempre se mantiene en su posición horizontal, así evita los vuelcos y los derrames innecesarios.

A la hora del desayuno, en el coche o cuando ya no sabemos que inventarnos para que se coma la fruta, lo cierto es que tiene un buen diseño, que a los niños les puede parecer un volante y, además, está fabricado con materiales de primera calidad y que se puede introducir, sin ninguna duda, en el lavavajillas. Es muy manejable y puedes utilizarlo para cualquier alimento.

Lo puedes comprar por Internet y en España lo comercializa Territorio Mini. El precio es de 12 euros, aunque los costes de envío son de 9 euros para la península. Si vives en Baleares, Canarias, Ceuta o Melilla, lo mejor es que contactes con ellos directamente. La entrega de los pedidos es de 24 a 72 horas.

Puede ser también un bonito y original regalo para, por ejemplo, el primer cumpleaños, seguro que a la mamá le hará mucha más ilusión que al niño.

Vía | Decopeques

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