Bebés en brazos: Espectadores de última hora en los juegos de Londres
Entiendo que las personas encargadas de organizar unos Juegos Olímpicos están sometidas a mucha presión, que tienen una obligación que yo no puedo ni, seguramente, podré percibir nunca. Pero que se tomen decisiones como la que expongo ahora, me parece surrealista.
Todo surge a raíz de la venta de entradas, para asistir a los recintos de los eventos deportivos en Londres 2012, desde marzo del año pasado. A principios de 2012, las entradas estaban agotadas y, algunas de las afortunadas que habían conseguido una, ya habían ampliado a la familia.
La indignación aparece cuando se sabe que la organización considera que un bebé debe tener su entrada o no podrá acceder a los recintos. Las reacciones no se hicieron esperar y la página Web mumsnet.com fue el lugar donde se depositaron opiniones de todo tipo en este año, reflejando que se infringían derechos sobre la igualdad sexual de la mujer.
Finalmente, el comité organizador (LOCOG) ha decidido aceptar la entrada a los bebés de hasta 12 meses de madres que hubieran comprado una entrada, con una sujeción segura a su padre o madre o a un cuidador que acceda con él. Y, salvo en Wembley, Newcastle’s St James’ Park, Old Trafford de Manchester y el North Greenwich Arena (hay que respetar las licencias que obligan a una entrada por persona), los «bebés en brazos» podrán acceder a todos los recintos deportivos de los juegos.
En resumen, que al final el vox populi se alza contra la toma de decisiones absurdas que a veces adoptan los comités, en este caso en materia deportiva. ¿Se imaginan a un bebé por su cuenta y riesgo, metido en el fondo norte o sur junto a los hooligans, animando a la selección olímpica inglesa de fútbol?. Lo dicho. Totalmente surrealista.
Vía | Público.es
Foto | Londres 2012