Bebé seguro durante la Navidad
Las fiestas navideñas representan un momento de alegría, ilusión y estimulación para los niños, por su colorido, decoración especial, reunión familiar y la magia de sus personajes; pero, no deja de ser un momento de posibles accidentes para los pequeños, con tanto movimiento y adornos que no corresponden a la cotidianidad de la casa. La concurrencia en tiendas, calles y desfiles es terrible en estas fechas, por lo cuál no se puede perder de vista al niño, ni soltarlo de la mano en ningún momento; para estos casos existen también aparatos para localizar a los niños.
En casa, para comenzar, el árbol de Navidad es un elemento casi irresistible para cualquier niño, a quién le despertará gran curiosidad; ver sus luces, querer alcanzar algún adorno o colgarse de una rama, morder un cable de lucecitas, tragarse alguna pequeña pieza de un adorno o cortarse con alguna bombilla rota. Son situaciones que debemos tratar de evitar, poniendo el árbol lejos del alcance del pequeño, con alguna barrera para que no llegue hasta él cuando está solo.
Los pequeños personajes del Belén o pesebre, pueden también ser tragados por el niño y causarle una asfixia; durante los primeros años de vida del niño, es mejor ubicar el pesebre lejos de su alcance, utilizando figuras grandes que no puedan ser tragadas ni mordidas o pegar los personajes al papel de pesebre con ayuda de la pistola de goma.
En cuanto al fuego, es importante asegurarse de poner las velas lejos del alcance de los pequeños, guardar los fósforos donde él no pueda alcanzarlos y utilizar una pantalla de protección para chimeneas y estufas; en ningún momento puede dejarse solo al niño en una habitación donde se tenga encendido cualquier tipo de fuego, aunque sea pequeño, como una vela, puede causarle mucho daño si la alcanza.
Los cables de las luces deben estar preferiblemente ocultos atrás de los muebles o bajo la alfombra, para que no pueda tropezarse con ellos, halarlos ni morderlos. No deben quedar a su alcance ningún tipo de adorno que se pueda romper y herirlo o asfixiarse con una pieza pequeña; así mismo, es conveniente retirar cualquier objeto de la mesa si se le ha puesto un mantel largo del que el bebé se pueda colgar y hacerse daño.
Las plantas decorativas como el muérdago o el acebo, podrían ser tóxicas si el niño las alcanza y las chupa, así que es mejor ponerlas lejos de sus manitas; tampoco pueden estar al alcance los bolsos y carteras de los visitantes en casa, si el bebé ya tiene coordinación para alcanzarla y abrirla. Podrían contener medicinas, lápiz de labios u otros objetos pequeños que puedan causarle un accidente.
Por último, si se visita la casa de algún pariente o amigo para pasar allí la noche, es muy importante tener bloqueadas al acceso del pequeño, escaleras, ventanas y balcones, ya que podría no estar familiarizado con estos espacios y caerse o lastimarse; cualquier momento de descuido podría representar un accidente, peor de a poco el pequeño se irá familiarizando con objetos y decoraciones y comprendiendo qué debe hacer con ellos y qué no.
Vía | Baby Center