Baby Ace, un tenista muy precoz
Con chupete y pañales, la nueva sensación del tenis británico se llama Jonah Ziff, tiene 2 añitos y le apodan Baby Ace. Parece que este niño prodigio del tenis no lo es por empeño de sus padres. Según cuentan ellos mismos, se sorprendieron al ver al pequeño peloteando en el patio de su casa con la raqueta de uno de sus hermanos mayores.
Jonathan y Danielle, los padres de este niño, decidieron apuntarle a clases de tenis en el gimnasio de David Lloyd en Narborough, donde también recibe clases uno de sus siete hermanos. Su padre declaró que «La pelota se le acercó y él pegó un perfecto drive. Pensamos que podía haber sido una casualidad, pero lo repitió una y otra vez. La gente se paraba a verle jugar. Me han dicho que Jonah es una especie de niño maravilla, que es bastante sorprendente».
En vista de la habilidad que demuestra Jonah y tras comprobar la expectación que desata, sus padres decidieron contratar un entrenador personal cuatro días a la semana. El entrenador opina que es dificil encontrar un niño de esa edad que no solo sepa coger una raqueta sino que además tenga la cordinación necesaria como para darle a la pelota. A esa edad es dificil, incluso, que se mantengan centrados en algo más de 10 minutos. El entrenador y los padres consideran que Jonah tiene un talento natural. Baby Ace tiene un potente drive, un buen revés y un extraordinario servicio que emplea jugando contra otros niños de su club. Los partidos son al mejor de 3 juegos y ha vencido a niños cuatro años mayores que él. Esperan que compita en un torneo de jóvenes promesas a final de año.
Los padres aseguran no querer presionar al niño y dicen que simplemente esperan que siga divitiéndose. Sin embargo, es muy fácil que se dejen llevar por la tentación de explotar la expectación que genera el niño. De momento ya le llevan a cuatro sesiones semanales de tenis, algo que puede ser demasiado incluso para un niño mayor. Esperemos que si Jonah cambia de hobby le respeten y no le fuercen a seguir. Y espero también que consulten con un especialista sobre la conveniencia de practicar un deporte de manera intensiva a tan temprana edad. En un tiempo comprobaremos si es realmente un prodigio o todo a quedado en las gracias de un niño de dos añitos.
Vía | Marca