Ayudarlos a jugar
Recién al segundo año de vida los niños empiezan a utilizar símbolos para jugar, por ejemplo, cuando ven a un gato dicen “miau”, o empiezan a repetir actuaciones que han visto en los mayores.
En ocasiones sex presentan algunas dificultades, que para los niños parecen insuperables, estas pueden llegar a enfrentarse por medio de algún juego, para poderlas absorber a su manera.
Un ejemplo claro de ellos son los celos que pueden surgir por el nacimiento de un hermanito, este conflicto es muy común y suele aparecerse detrás de algún juego como una reacción a procesos internos que el niño hace inconscientemente, mediante este procedimiento podrá aceptar la realidad, y ver el problema de una nueva manera que es más grata para él.
En el juego se da una adaptación entre lo imaginable, en donde todo es posible, y permitido (lugar donde aparecen las reglas de conducta) en donde el pequeño tiene tiempo de aprender lo que es factible y lo que es correcto.
Fuente| Revista Mi Bebé