Alergias alimentarias en niños: Pescado
A lo largo del primer año de vida de nuestro bebé se le irán ofreciendo todos los alimentos que conforman la pirámide alimenticia. De forma paulatina, y siempre siguiendo las instrucciones del pediatra, nuestro peque pasará de la alimentación única de la leche materna, al resto de alimentos. Hacerlo de forma escalonada, nos va a permitir observar si nuestro peque sufre alguna alergia o intolerancia alimenticia.
Una de ellas, y que suele ser especialmente frecuente, es la alergia al pescado. A pesar de tratarse de uno de los alimentos más ricos en proteínas y completos, son muchos los niños que presentan un rechazo orgánico. Esta intolerancia suele manifestarse a lo largo del primer o segundo año y no se presenta en todas las especies, siendo unos pescados más peligrosos que otros.
La culpable de esta alergia es una proteína llamada parvalbúmina, por eso dependiendo de la cantidad de esta proteína que contenga el pescado, así será su incidencia. En nuestro país, el pescado que más cantidad contiene de parvalbúmina es el gallo, también la merluza y la pescadilla. En cambio, los que mejor se toleran son el emperador, el atún y el cazón. Otro factor importante es la forma de cocinarlo. Existen alérgicos al atún, por ejemplo, que no lo toleran hervido o a la plancha, pero sí, en cambio, pueden tomarlo perfectamente en conserva.
Los síntomas que presentan los alérgicos al pescado suelen ser los mismos que con cualquier otra alergia alimentaria: sarpullido en la cara o el cuerpo, hinchazón de labios, párpados y orejas, picor de garganta, o vómitos y diarrea. Es importante actuar rápido y llevarle al centro sanitario más cercano con el fin de que sea tratado con antihistamínicos, y si es muy grave con adrenalina.
A partir de ese momento, lo más probable será que tu pediatra pida una serie de pruebas para comprobar hasta qué grado y si hubiera alguna alergia más. Por regla general, los alérgicos a ciertos pescados no lo son a todos, ni tampoco a otros alimentos marinos, como los mariscos.
Vía | AEPNAA
Foto | Pixabay – Na4ev
Comentarios cerrados