8 ingredientes que influyen en el aprendizaje del bebé

Los primeros años de la vida del ser humano reflejan una alta capacidad de aprendizaje. Es en este periodo cuando se producen objetivos tan significativos como dar los primeros pasos, pronunciar nuevas palabras o adquirir un mayor nivel de autonomía. ¿Cuáles son los factores que influyen positivamente en el aprendizaje infantil?

1. Imitación

El hogar y la escuela infantil son dos espacios en los que el bebé se fija en el ejemplo de adultos que protagonizan diferentes escenas de la rutina cotidiana. Las situaciones que el peque percibe en su entorno más inmediato le ofrecen un espejo a través del que descubre la realidad. Por ello, el ejemplo y la capacidad de imitación están muy presentes en este proceso.

2. Ensayo y error

El ensayo y el error son esenciales en todas las etapas de la vida. Como puedes comprobar en tu propia experiencia, es un proceso esencial para perseverar y volver a intentarlo. Pero el significado de dos conceptos que están tan unidos se percibe con especial nitidez en la rutina del bebé. Por medio del ensayo y el error el niño adquiere experiencia práctica y amplía la zona de confort.

3. Estímulos

El bebé interactúa con aquellos que le rodean y con el espacio en el que se encuentra. Sin embargo, la respuesta y la atención dependen, en gran medida, de los estímulos recibidos que ofrecen información que conecta directamente con los sentidos.

4. Entorno preparado

En definitiva, el contexto también forma parte del propio proceso de aprendizaje. Un espacio preparado y seguro facilita la autonomía del niño. La importancia del ambiente adquiere una visibilidad especial en el ámbito de un centro educativo que cuenta con unas instalaciones amplias, cómodas, seguras y perfectamente decoradas.

5. Atención

El niño recibe numerosos estilos del entorno pero no todos despiertan el mismo nivel de interés. Los elementos que captan la atención del bebé influyen de forma especial en su evolución, desarrollo de habilidades y logro de nuevas metas. Un proceso de aprendizaje es personalizado en sí mismo. Por ello, existen variables externas e internas que influyen en la experiencia de descubrimiento.

6. Orden

El orden es un concepto que presenta formas diferencias. Por ejemplo, puede percibirse en la decoración de una estancia infantil. En ese caso, cada elemento encuentra su lugar y el equilibrio es visible en el interior. ¿Pero cómo se manifiesta este ingrediente en la organización del tiempo? A través de la integración de hábitos y costumbres que crean una base esencial para el niño.

7. Tiempo

La vida del ser humano se desarrolla al compás del tiempo. Y, en consecuencia, los aprendizajes siempre se materializan en un constante presente. Pero no existen plazos definitivos para alcanzar diferentes metas, sino que cada bebé posee su propio ritmo.

8. Clima afectivo

Un entorno positivo desde el punto de vista afectivo eleva la confianza y la curiosidad. En definitiva, crea el arraigo, el acompañamiento y la seguridad necesaria para evolucionar.

El aprendizaje es un proceso que está iluminado por los objetivos. Sin embargo, existen diferentes variables que intervienen en el proceso.

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