7 consejos para elegir nombres compuestos para bebés

La elección de un único nombre es una elección habitual en quienes se encuentran en el momento de tomar esta decisión. Pero, en ocasiones, la determinación final muestra un nombre compuesto. Elegir una opción ideal, entre la amplia variedad de posibilidades, no siempre es una experiencia sencilla. Por ello, el proceso puede ser más complejo todavía cuando existe la posibilidad de combinar dos opciones diferentes.

En Uno más en la Familia, te damos siete consejos para elegir un nombre compuesto de niña o de niño.

1. Vinculación

Tal vez un nombre te encante cuando no está acompañado por ningún otro. Y también puede ocurrir que una idea te resulte más atractiva al ponerla en conexión con otra. La belleza final de un nombre compuesto refleja el equilibrio de dos palabras en armonía.

2. Valor afectivo

A veces, uno de los ingredientes de un nombre propio de estas características tiene un origen emocional. Así ocurre cuando la opción elegida rinde homenaje a un familiar que se llama de ese modo. Pero también ocurre que algunas personas prefieren evitar el efecto de una repetición idéntica. Y, en ese caso, combinan dicho nombre con otro que lo diferencia.

3. Número de sílabas

Un nombre compuesto incrementa de forma significativa su extensión, ya que suma el número de sílabas de los ingredientes que lo componen. Por este motivo, al formar la combinación de una idea compuesta, es posible seleccionar dos nombres breves. También puede ocurrir que uno de ellos destaque de forma principal, mientras que el otro, más allá de su brevedad, realiza un perfecto acompañamiento.

4. Inspiración clásica

Si buscas ideas de inspiración para elegir el nombre de tu bebé, existen muchas fórmulas clásicas que pueden ayudarte a concretar tu elección final. Muchos nombres compuestos de niña incluyen María o Ana. Lo mismo ocurre en el caso de aquellos nombres de niño que contienen Ángel, Luis, José o Antonio.

5. Diferenciar un nombre frecuente a través de una combinación original

Hay nombres que gustan mucho a los padres, aunque observan el inconveniente de que son muy habituales. Y, por ello, es probable que el niño coincida con varios compañeros de clase que se llaman del mismo modo. En ese caso, un nombre compuesto permite diferenciar esa propuesta dándole un nuevo contexto.

6. Dificultades para elegir entre dos nombres

También ocurre que, en ocasiones, un nombre compuesto es el resultado de la propia dificultad para elegir una única opción cuando existen dos ideas que encantan a los progenitores. Y la combinación de ambos es la elección definitiva para llamar al bebé de ese modo.

7. Compara distintas referencias

Realiza distintas combinaciones de nombres para comparar entre varias alternativas. La comparación te ayuda a ampliar el campo de búsqueda con más posibilidades que tal vez no habías contemplado en un primer momento.

No solo puedes escuchar la sonoridad de una idea, sino también observar de forma visual cómo queda ese compuesto al escribirlo sobre el papel. Además, conviene dar importancia a ambos nombres. En caso contrario, es probable que la familia termine llamando al niño, únicamente, por una de ambas opciones.

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