7 beneficios de la meditación durante el embarazo

La meditación es una disciplina que aporta un método para incrementar la conexión con el presente y la serenidad. Los beneficios de esta práctica aumentan con la constancia. Es probable que alguien que se siente poco familiarizado con el silencio, evite la introspección. La incomodidad forma parte del propio aprendizaje de la meditación.

Y, en consecuencia, es recomendable superar la resistencia al cambio a través de la paciencia. Meditar produce beneficios saludables en diferentes etapas de la vida, también en el embarazo. En Uno más en la Familia compartimos algunos ejemplos.

1. Un mejor descanso

Este estado de relajación influye de forma directa en uno de los pilares más importantes del bienestar: aumenta la calidad del sueño y, por tanto, el descanso.

2. Relativizar las molestias y las dificultades

El periodo de embarazo no es ideal. ¿Pero cómo puedes afrontar de un modo más creativo aquellas circunstancias o factores que no dependen de ti? La meditación te ayuda a alimentar una nueva mirada. Aquella que integra la aceptación como parte del proceso de aprendizaje.

3. Relajación corporal

Los beneficios de la meditación son holísticos, es decir, nutren tu cuerpo, tu mente y tu mundo interior. Desde el punto de vista físico, esta disciplina es clave para aliviar tensiones que puedes experimentar en un proceso de adaptación al cambio. El control de la respiración produce un agradable efecto de calma y serenidad.

De este modo, mejora tu higiene postural. Las tensiones corporales también están directamente vinculadas con el mundo emocional y con el pensamiento. Por ejemplo, la anticipación del temor del momento del parto genera una preocupación que se transmite directamente al cuerpo.

4. Conexión emocional con el bebé

La meditación incrementa el nivel de concentración, reduce los ruidos y distracciones. De este modo, no solo escuchas mejor tu diálogo interior, sino que también te sientes más cerca de tu bebé. Esta conexión previa al nacimiento del niño fortalece un vínculo que se encuentra en su etapa inicial.

5. Prevenir la depresión postparto

El hábito de practicar la meditación durante el embarazo propicia el cuidado emocional en un periodo de la vida que marca el inicio de un camino en constante transformación. Intensificar el autoconocimiento en esta etapa es clave para minimizar el riesgo de depresión postparto. Esta preparación también fortalece la resiliencia para afrontar la crisis de identidad que experimenta quien descubre y aprende un nuevo rol en su vida.

6. Vivir un embarazo plenamente consciente

Este no solo es un beneficio que influye en tu presente más inmediato, sino también en el modo en el que recuerdes esta etapa de tu vida cuando estos meses queden atrás.

7. Ampliar tus recursos personales para vivir un embarazo feliz

A través de este proceso de autodescubrimiento es posible que conozcas otros aspectos de ti misma. Puedes conocer tus fortalezas para afrontar un momento único de tu existencia y desarrollar nuevas habilidades.

Por tanto, existen numerosas razones para ejercitar una meditación que pone en valor el instante desde su dimensión más profunda y real. ¿Qué otras experiencias te gustaría comentar en relación con este tema?

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