6 reflexiones importantes sobre la elección de un buen colegio
Pocos temas adquieren tanta relevancia para los padres desde el punto de vista educativo como la elección del colegio. A veces, la búsqueda del centro ideal parece poner el foco en las características del proyecto en sí mismo. Sin embargo, el proceso de búsqueda debe ir más allá para poner el foco en los padres. Por esta razón, en Uno más en la Familia compartimos 6 reflexiones que no deben pasar desapercibidas.
1. Coherencia con tus valores y estilo educativo
Tal vez un colegio destaque por los excelentes resultados académicos que logra alcanzar un alto porcentaje de sus alumnos. Pues bien, los valores que guían a los profesionales del centro tienen una relevancia notable en la filosofía de trabajo. Si no existe una coherencia entre los valores del centro y la familia, es posible vivir contradicciones intensas y transmitir esa falta de coherencia entre ambos planos a los niños.
2. Si no existe la familia perfecta, tampoco hay un colegio ideal
La búsqueda de un buen colegio puede convertirse en un proceso complejo y difícil para los padres si la perfección guía el camino. Sin embargo, no tiene sentido buscar un colegio ideal, así como tampoco conviene aspirar a ser la familia perfecta. Generalmente, la perfección en cualquier plano se alinea más con la apariencia que con la autenticidad.
3. Hasta dónde estás dispuesto a implicarte para crear un buen tándem con el centro
La elección de un buen colegio no sitúa a los padres en el rol de espectadores, sino de actores activos en la relación con el centro. Es decir, el nivel de implicación suele ser máximo durante la fase de búsqueda, pero tiene que prolongarse más allá durante la vida académica del alumno. ¿Hasta dónde estás dispuesto a implicarte para crear un buen tándem con el centro? Tu nivel de implicación también influye en la valoración que haces en torno a la calidad del proyecto.
4. ¿Cuáles son las necesidades de tu hijo?
La búsqueda de un buen colegio puede partir desde diferentes perspectivas. ¿Cuál es la más indicada, aquella que no debe pasar desapercibida? Es especialmente importante que el proceso se centre en la búsqueda de un centro que se ajusta lo máximo posible a las necesidades concretas del niño.
5. La elección no es inamovible: es posible cambiar de colegio
Hay un aspecto que conviene recordar cuando la búsqueda de un buen colegio produce presión, preocupación o estrés. Conviene confiar en la propia capacidad de elección para seleccionar el centro indicado. Además, hay que señalar que si la elección finalmente no se percibe como un acierto a largo plazo, es posible cambiar de colegio.
6. ¿Qué oportunidades ofrece el entorno del colegio?
El entorno del colegio puede integrarse como un valor añadido en la elección del centro. Generalmente, es habitual valorar la cercanía entre las instalaciones y el domicilio. Pero hay otros muchos aspectos que conviene considerar: la red de servicios que se enmarca en la zona, la seguridad o la presencia de espacios verdes.
Finalmente, existe una última cuestión que debes considerar como progenitor durante la etapa de búsqueda del centro adecuado para tu hijo. ¿Cuál es el aspecto esencial que debe estar presente en el proyecto como una prioridad? Ya hemos comentado que no hay ningún colegio perfecto. Por ello, conviene aspirar a una búsqueda más realista al poner el acento en lo esencial.
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