6 beneficios de los juegos de imaginación en la infancia
Seguro que en más de una ocasión has observado cómo tu hijo siente curiosidad por recursos muy sencillos frente a otras opciones de juego más elaboradas que tiene a su alcance. Sin duda, la imaginación es un don que abre puertas, un don que también se desarrolla y se entrena por medio del juego. De hecho, existen juegos y dinámicas que ponen el acento en el potencial creativo del ser humano. ¿Qué ventajas aportan los juegos de imaginación en la infancia?
1. Transformar la realidad por medio de la representación
Por medio del juego imaginario, el niño tiene la capacidad de sumergirse en otras situaciones, roles, funciones y tareas. Así como por medio de la lectura de un cuento, el lector se adentra en el universo propio de la historia, los juegos de imaginación también tienen su propio lenguaje simbólico.
2. Juegos que promueven la práctica de habilidades sociales
Los juegos de imaginación, con frecuencia, se desarrollan en el contexto de un grupo. En definitiva, transcurren en el ámbito de un equipo. Por ello, aportan un escenario práctico para ejercitar las habilidades sociales y aprender principios específicos como el respeto de los turnos en un proceso en el que participan varias personas.
3. Un juego que tiene una dimensión emocional y afectiva
Como hemos comentado, el niño puede meterse en la piel de otros personajes y adentrarse en realidades diferentes a través del poder de la imaginación. Un ejercicio de empatía e inteligencia emocional que puede ser clave para entender una amplia variedad de sentimientos, sensaciones y emociones.
4. Fomento de la autoestima
A través de los juegos de imaginación, el niño se sumerge en otras realidades, pero también se muestra y se descubre a sí mismo. En consecuencia, el desarrollo de la imaginación, la creatividad, las habilidades sociales, el lenguaje corporal y el sentido de pertenencia en el grupo nutren los pilares de la autoestima infantil.
5. Aprendizaje
Los juegos tienen un importante poder desde el punto de vista educativo porque promueven el descubrimiento y el aprendizaje de la realidad. Pues bien, la imaginación suma nuevos matices a ese universo con el que interactúa el niño. Tiene la capacidad de adentrarse más allá de la realidad inmediata para recrear otros universos que, como comentamos, alimentan el aprendizaje personal.
6. Resiliencia frente al aburrimiento
En un tiempo en el que los niños crecen rodeados de estímulos, distracciones constantes y pantallas, el aburrimiento parece convertirse en un imposible o en una experiencia que debe evitarse. Sin embargo, el aburrimiento en la infancia no es negativo.
Y los juegos de imaginación muestran que esa sensación de vacío que queda en un momento de aburrimiento no tiene por qué llegar a su fin a partir de un factor externo, sino que el propio niño cuenta con el gran poder de su imaginación para crear, construir, representar y vivir nuevas experiencias. Además, el niño hace partícipe a otras personas cercanas de su propio mundo interno por medio del lenguaje del juego que ofrece un espacio para el encuentro y la interacción.
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