6 beneficios de la biblioteca escolar en la comunidad educativa

En el proceso de búsqueda de un centro educativo que se alinee con las prioridades familiares, existen muchos aspectos que pueden pasar desapercibidos. La biblioteca escolar es uno de los espacios de referencia en el entorno académico. Es un contexto que forma y educa a alumnos, padres y profesores. En definitiva, aporta recursos y medios que fomentan el acceso a la cultura en todos los hogares. ¿Cuál es su aportación a la comunidad educativa? En Uno más en la Familia enumeramos seis beneficios.

1. Una comunidad lectora

Las bibliotecas crean comunidad. Es decir, unen a personas que se reúnen en torno a los libros. Incluso cuando no existe una conversación directa entre dos usuarios, cada uno puede convertirse en un modelo de lectura para el otro. En definitiva, la biblioteca aporta referentes positivos.

2. El centro orienta a las familias en la elección de libros infantiles

Es recomendable que familias y centros educativos tengan un diálogo constante. Pues bien, la biblioteca escolar crea un punto de encuentro. Padres y madres pueden consultar dudas en torno a la educación literaria de sus hijos. El centro aporta orientación y asesoramiento para que las familias seleccionen títulos adaptados a las necesidades de sus hijos.

3. Acceso a materiales gratuitos

El intercambio de libros favorece el acceso a la cultura. Además, es un servicio que alimenta la práctica de valores que afianzan las bases de la comunidad educativa: la colaboración y el cuidado del entorno. La biblioteca escolar es un lugar de bienvenida y de igualdad de oportunidades para que todas las familias, más allá de sus circunstancias, tengan la oportunidad de disfrutar de obras de calidad.

4. Fomentar la animación a la lectura en casa y en el colegio

La colaboración entre centros educativos y familias puede alinearse en diferentes direcciones. Es positivo que el gusto por leer se alimente en el entorno académico, pero también en el hogar. Pues bien, la biblioteca escolar ofrece la fórmula perfecta para lograr este propósito: aporta recursos a profesores y familias.

5. El papel del bibliotecario escolar

La labor del bibliotecario es clave para disfrutar verdaderamente del servicio ofrecido por una biblioteca escolar. Se implica para ordenar, presentar y organizar las obras del catálogo. También realiza un seguimiento de los materiales prestados y de los libros que ya han sido devueltos.

Además, es un profesional que tiene un amplio conocimiento literario. Por ello, resuelve preguntas frecuentes en familias y educadores. Por tanto, es un profesional que crea un equipo con los compañeros que forman parte del organigrama del centro y, también, con los padres de los alumnos.

6. Contenidos variados y adecuados para diferentes edades

Existen muchos autores que publican obras para bebés, niños o adolescentes. El catálogo de una librería es muy extenso. El de una biblioteca también lo es, pero existe un importante proceso de selección. En definitiva, los centros educativos invierten en materiales de calidad que facilitan el cumplimiento de los objetivos de lectura. Son obras que aportan una educación literaria.

Por tanto, la biblioteca escolar fortalece la comunidad educativa. Por ello, es un factor que conviene tener en cuenta en la elección de un centro educativo infantil.

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