5 consejos para hacer nuevos amigos después de ser madre
La infancia, la adolescencia y la juventud son periodos de la vida que están directamente vinculados al valor de la amistad y el tiempo compartido en común. Sin embargo, la maternidad puede plantear un importante punto de inflexión en la estructura del círculo social más cercano. En ocasiones, el número de contactos se reduce de forma significativa.
Pero eso no significa que esos contactos fuesen verdaderas amistades (aunque tampoco quiere decir que fuesen poco importantes). Los vínculos pasan por diferentes etapas, en ocasiones dos personas caminan en direcciones diferentes. Pero ningún estado es permanente. ¿Cómo hacer amigos nuevos después de ser madre? En Uno más en la Familia compartimos cinco consejos.
1. Temas de conversación más allá de la maternidad
La maternidad aporta numerosos temas de conversación que pueden unir a dos personas que atraviesan un momento similar. Sin embargo, el diálogo puede llegar a convertirse en un monólogo cuando una persona que se encuentra en una etapa diferente siente que no se tiene en cuenta su realidad o que parece menos importante.
2. Todas las nuevas amistades no tienen por qué girar en torno al bebé
Es probable que a través de tu hijo puedas coincidir con otras personas con las que empiezas a crear vínculos significativos. Pero eso no implica que tu círculo social tenga que girar únicamente en torno a tu nueva faceta como madre. Es decir, aprovecha la oportunidad de conocer gente nueva en otros espacios en los que se presente la posibilidad. Existen coincidencias que no se planifican y es recomendable identificar el momento cuando surge una conexión especial.
3. A través de otras personas cercanas
Algunas amistades tienen su raíz en un punto de encuentro: el vínculo con un amigo común. Es una coincidencia que puede aportar una sensación de cercanía o de familiaridad (aunque ese hecho no garantiza que vaya a surgir una relación de confianza).
4. Disfruta del proceso
Construir una nueva amistad no es un objetivo que se concreta en un día. La experiencia requiere de un proceso que es positivo disfrutar. Ninguna relación puede crecer si no existe reciprocidad o si la base de la amistad es muy desigual (en relación con aquello que aporta cada uno). Por ello, si quieres ampliar tu círculo social en esta etapa, es aconsejable que te impliques en el proceso (aunque no sea el objetivo al que dediques más tiempo). En definitiva, es importante que esas nuevas personas puedan formar parte de tu vida, en mayor o menor medida, con todo lo que ello implica (tal vez también formen parte de tu entorno familiar).
5. Aunque cambian las circunstancias, lo esencial permanece cuando se trata de hacer amigos
Aunque ahora tengas menos tiempo que antes para organizar planes y no dispongas de las condiciones deseadas para improvisar encuentros con amigos. Aunque ahora percibas la amistad desde un ángulo más amplio. Más allá de cualquier observación posible, lo esencial permanece cuando se trata de hacer amigos nuevos. Es decir, es importante cultivar las habilidades sociales, mostrar interés por conocer a la otra persona y tomar la iniciativa para mantener el contacto (con mayor o menor frecuencia).
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